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ECONOMÍA

Los precios se disparan en Castellón un 11,9% y sitúan a la provincia como la quinta más inflacionista

La electricidad, los combustibles y los alimentos están detrás de esta histórica subida

Los precios se han disparado en Castellón en marzo hasta su nivel más alto en casi 40 años

Vivir en Castellón es casi un 12% más caro que hace un año. Los precios siguen desbocados y la última actualización del Índice de Precios al Consumo (INE), que acaba de publicar el Instituto Nacional de Estadística (INE), corrobora que la inflación cerró marzo en la provincia en el 11,9%, dos puntos más que la media nacional (9,8%), la misma tasa que se había adelantado hace quince días y que supone el valor más alto desde hace 37 años tras un mes de guerra en Ucrania.

El coste de la vida se desboca en Castellón y, además, la provincia es una de las más inflacionistas del país. En el último año, y siempre según los datos del INE, los precios solo han subido más en otras cuatro provincias: Huesca, León, Ávila y Toledo. Ese 11,9% de incremento registrado en Castellón supera el alza de las otras dos provincias valencianas. Alicante acumula una inflación del 10,5% mientras que en el caso de Valencia la cifra asciende a 9,7%.

La estadística del INE refleja también que el principal causante del subidón de los precios en Castellón es el componente de la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles que han subido un 41,4% en el último año. A este apartado le sigue el transporte, por el alza de las gasolinas y el gasóleo, con un 19,3%, el vestido y el calzado, con un 12.9% y los alimentos y bebidas no alcohólicas, con el 7,68%. A nivel mensual, las subidas más pronunciadas fueron las de los combustibles líquidos y las de la electricidad.

La escalada experimentada por los precios está estrechamente vinculada a los costes de la energía que se han trasladado al conjunto de la economía, como revela la inflación subyacente, la que excluye la energía y los alimentos no elaborados, situada en el 3,4%, la más alta desde septiembre de 2008. Esta evolución ha empeorado como consecuencia de la guerra de Ucrania, que ha llevado al Gobierno a poner en marcha un plan de choque que deberá convalidarse a finales de mes en el Congreso.

El despegue del índice de precios de consumo, que ha llevado al tasa interanual a los niveles de hace casi 40 años, no hace más rebajar el poder adquisitivo de los salarios, pero también del ahorro y provoca subidas de los alquileres. Por ello, de hecho, el Gobierno ha limitado al 2% el aumento de las rentas hasta el próximo 30 de junio.

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