El próximo lunes, 12 de septiembre, Castellón dará el pistoletazo de salida a un curso de récord, en cuanto a cantidad de alumnado y docente se refiere respecto a los últimos años, marcado por la aplicación en niveles impares de la nueva ley educativa, la Lomloe, pero también por dejar atrás la mayor parte de las limitaciones y protocolos anticovid que tanto han condicionado la actividad académica durante los ejercicios anteriores.
El récord lo plasman las cifras. La provincia contará con 95.855 alumnos entre los diferentes niveles, un 0,1% más respecto al año anterior, motivado fundamentalmente por la mayor demanda en niveles posobligatorios como el Bachillerato y la Formación Profesional (FP). Todos ellos serán atendidos por 10.059 docentes, un 0,5% más, por lo que se mantiene el refuerzo de la plantilla del año pasado pese a haber mejorado la situación de pandemia.
La consellera de Educación, Raquel Tamarit, junto al secretario autonómico del área, Miguel Soler, y el resto del equipo del departamento autonómico dieron cuenta ayer de las novedades: «Arrancamos nuestro octavo curso escolar para favorecer la educación basada en la coeducación, la mejora de infraestructuras, que el alumnado se forme más allá de la educación obligatoria, el profesorado trabaje en condiciones dignas y los niños y niñas tengan una vuelta a clase llena de certidumbres», apuntó Tamarit.
Nueva ley
La adaptación a la nueva ley educativa se pondrá en práctica este lunes, con la que Tamarit defendió «nos sentimos muy cómodos en nuestro territorio, pues incluye metodologías que ya se venían aplicando y no resultan nuevas ni a la Conselleria ni al profesorado». En cuanto a la metodología, ocho de cada diez centros optarán por la enseñanza por hábitos en 1º de ESO, según ha decidido cada uno tras el fallo judicial del TSJCV.
Bajada de ratios
La ratio media de las aulas volverá a reducirse este próximo curso con el incremento de las plantillas de docentes. En Infantil y Primaria estará fijada en 19,4 alumnos (1,3 menos) y en ESO y Bachillerato en 26,6 (0,8 menos). De esta forma, el sistema educativo valenciano tendrá, de media, un maestro por cada 12 alumnos en colegios y un profesor por cada diez estudiantes en institutos.
Protocolo covid
La práctica desaparición de las medidas frente al covid-19 llegará también este año. Tamarit concretó que no existirá la organización mediante grupos burbuja y ni la obligación de mantener la distancia mínima interpersonal en las aulas. Ahora bien, se mantendrá la ventilación de los espacios interiores, aunque será de forma puntual, sin necesidad de mantener las ventanas de los centros abiertas durante toda la jornada. No obstante, Soler matizó que el protocolo completo se cerrará durante los próximos días entre la Conselleria de Educación, la de Sanitat y de forma conjunta con el Ministerio de Sanidad.
Reducir gastos
Sobre la reducción de gastos familiares, la consellera hizo mención a la escolarización en la etapa de 0 a 3 años, con la universalización de la gratuidad de las aulas de 2 años y la progresiva extensión al resto de niveles, que por ahora tendrán ayudas para las familias vinculadas a la renta. Por otra parte, 55.922 alumnos se beneficiarán del programa Xarxa Llibres, que dota a las familias de libros de texto gratuitos a través de bancos de cesión pública, lo que «ahorra unos 300 euros en la compra de estos materiales básicos». Además, crece la dotación en becas comedor y se pretende implantar un proyecto piloto para proporcionar desayunos saludables en los centros con más población vulnerables.
Formación Profesional
La Formación Profesional se verá reforzada este curso, sumando en la provincia de Castellón 546 plazas a través de la apertura de 19 titulaciones nuevas, «en línea con las necesidades de los sectores productivos». Con todo, se alcanzarán así los 12.501 alumnos, con 659 más que el ejercicio precio.
Infraestructuras
La mejora de infraestructuras educativas incluye la inauguración de tres centros completamente renovados en Santa Magdalena de Pulpis, Almassora y Castellnovo. Durante el curso se finalizarán otros cuatro en Morella, Almassora y Castelló (2), mientras que la provincia tiene 15 obras activas con una inversión que alcanza los 63,6 millones de euros.
