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NOTARIADO

¿Merece la pena hacer testamento? 4.000 se han firmado en lo que va de año en Castellón

Registrar la voluntad cuesta 40 €, cuando hacerlo a posteriori vale más de 250

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¿Merece la pena hacer testamento? En el primer semestre del año se han registrado ante notario 4.294 testamentos en la provincia de Castellón, una cifra algo inferior al mismo periodo del 2021, en que se rubricaron 4.758.

Puede que por efecto de la pandemia, hubiera una mayor sensibilidad acerca de los legados el año pasado. No obstante, según los datos que maneja la delegación en Castellón del colegio notarial de Valencia, no se ha apreciado un importante cambio de tendencia en estos momentos.

¿Por qué?

No obstante, los expertos consultados por este periódico recomiendan hacer testamento, porque es más práctico y evita papeleo innecesario a los herederos. De hecho, si no se efectúa este trámite, hay que realizar una acta notarial de declaración de herederos que resulta más costosa económicamente. A ello que hay que añadir la necesidad de aportar testigos que ratifiquen las circunstancias y certificados. 

¿Cuánto cuesta?

Para hacerse una idea, un testamento tiene un coste de 40-45 euros cuando un acta de declaración de herederos ascendería a 250-300. Eso suponiendo que el documento en cuestión establezca unas disposiciones que sean las que la ley tiene establecidas cuando no hay testamento. 

La ley y la voluntad

Más complejo es si la persona quiere distribuir su herencia de una forma distinta a la que la normativa apunta. En esos casos, este trámite se hace imprescindible. Sería por ejemplo, cuando se quiere preferenciar a un hijo frente a otro. En lo referente a la parte que heredarían los vástagos, la ley establece que la percepción sea a partes iguales. Si no se hace testamento, no se va a poder dejar más a un descendiente que a otro. 

A ello hay que sumar la tendencia cada vez más frecuente a tener hijos de distintas relaciones matrimoniales. Los nuevos tipos de familia han propiciado que en muchas ocasiones la voluntad de los finados respecto a su legado sea distinta de lo que marcaría la ley. Sería, por ejemplo, el caso de una persona que no haya contraído matrimonio con su pareja pero que quisiera dejarle algo a su compañero sentimental y que sin este documento no percibiría nada. 

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