"Físicamente estamos bien, pero mentalmente no", explica el patrón del barco incendiado en el Grao de Castellón

«Vimos humo, intenté bajar a abajo, no tenía visibilidad. Lo primero que pensé fue en la gente», explica Albiol

Reunión del director general de Pesca con la tripulación de la embarcación

Reunión del director general de Pesca con la tripulación de la embarcación

Carmen Tomás Armelles

Carmen Tomás Armelles

"Físicamente todos estamos bien, pero mentalmente estamos jodidos». Así hablaba este miércoles Ángel Albiol, el patrón del Nova Tía Cinta, la embarcación que el martes se hundió en el mar tras un incendio.

«Vimos humo, intenté bajar a abajo, no tenía visibilidad. Lo primero que pensé fue en la gente», explica Albiol. Y es que con la fibra y la resina, explica, cuando prende «es como una cerilla».

Los marineros abandonaron el barco de arrastre a bordo de una balsa salvavidas, siendo rescatados después por una embarcación de Consulmar, que los llevó a Puerto, aunque el fuego ya no pudo ser sofocado y se hundió a cuatro millas del Puerto de Castelló

«Si hubiera habido una desgracia personal, como patrón no me lo hubiera perdonado. Lo hemos hecho bien», reflexionaba Albiol, quien todo lo que pedía era «descansar mentalmente, sobre todo la cabeza». Y es que, confesaba Albiol, «te vienen las imágenes de lo ocurrido». Recuerda que hacía mala mar, sobre todo, que soplaba el viento con fuerza. Desconoce las causas del incendio, si pudo ser un cortocircuito.

Lo ha perdido todo

Cinco familias dependían del barco. Albiol pensaba especialmente en «un chico que vivía en el barco». «Nosotros tenemos casa, pero él lo ha perdido todo». "Ahora está sin documentación y esta semana próxima tenía previsto irse a Marruecos a ver a su familia", señala.

El patrón mayor, Manuel Peña, señala que los marineros estaban a popa seleccionando el pescado y el patrón al puente de mando. Saltó la alarma, vieron el humo pero ya no se podía hacer nada. «Lo importante es que estén todos bien», explica Peña, quien manifiesta que «actuaron con mucha calma». La rápida reacción, la proximidad del Puerto, la coordinada intervención de las embarcaciones que participaron en el salvamento y la templanza con la que se desplegaron permitió que llegaran sanos y salvos a tierra.

El director general de Pesca, Francisco Espinós, mantuvo este miércoles una reunión con los marineros, a quienes les transmitió el respaldo del Consell y lamentó la desgracia sufrida. También les ofreció ayuda de la Conselleria en la tramitación de la nueva documentación. A ello se suma las actuaciones de Stella Maris y del Ayuntamiento.

El director general agradeció a las personas e instituciones que participaron en el salvamento su rápida actuación, lo que permitió salvar con vida a los tripulantes y que se encuentren en perfecto estado de salud.

Espinós añadió que este accidente supone un golpe a la ya de por sí delicada situación que atraviesa el sector de la pesca en la Comunitat Valenciana.

Armador

Y es que la Cofradía de Pescadores del Grau se ha quedado con un barco menos. Hoy está previsto que el armador, de Benicarló, se reúna con la tripulación. El marinero marroquí sin hogar está siendo alojado en un hotel.