La Confederación del Júcar insta a los ayuntamientos a ahorrar agua y avisa que lo peor está por llegar

La zona más afectada por la falta de agua se localiza en el interior de Castellón

Situación del embalse de María Cristina, en el término municipal de l'Alcora.

Situación del embalse de María Cristina, en el término municipal de l'Alcora. / Toni Losas

La Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) no prevé que se produzcan restricciones en el abastecimiento urbano este año, aunque este verano sí que pueden registrarse "problemas puntuales" en determinadas localidades pequeñas, sobre todo en el interior de Castellón, por lo que recomienda que los ayuntamientos apliquen ya campañas de ahorro porque "la sequía está empezando".

Así lo han señalado el presidente de la CHJ , Miguel Polo, y la jefa de la Oficina de Planificación Hidrológica, Arancha Fidalgo, antes del inicio de la jornada informativa De qué hablamos cuando hablamos de sequía', y en la que se ha informado a ayuntamientos e interesados de la situación actual de sequía prolongada y escasez hídrica y de la gestión que realiza el organismo en estas situaciones. A la jornada, celebrada duranta la mañana de este viernes en valència, se han convocado a los 700 ayuntamientos que forman parte del organismo para analizar su situación y diseñar soluciones en la planificación hidrológica.

La jefa de la Oficina de Planificación Hidrológica, Arancha Fidalgo, ha lanzado un mensaje de "tranquilidad" a la población porque la situación para abastecimiento urbano --que incluyen el uso para consumo humano, piscinas, duchas, riego de jardines o baldeo de calles-- "no es preocupante" porque todavía se cuenta con disponibilidad de recursos.

No obstante, ha advertido, sí que puede haber este verano restricciones "en casos muy concretos de pequeñas poblaciones que se abastezcan de algún manantial o de pozo en los que ha bajado el nivel de las aguas por las lluvias escasas".

Los municipios de más de 20.000 habitantes están obligados a redactar planes emergencia con las medidas para afrontar los distintos niveles de sequía y la CHJ recomienda que apliquen ya campañas de ahorro, como bajar la presión para gastar menos agua o recomendar la ducha en lugar del baño, porque "no sabemos cómo va a evolucionar la situación". "Estamos empezando la sequía, es el primer año que se nota esa disminución de precipitaciones, y si esto dura varios años empezará a ser más grave", ha advertido.

Al respecto, el presidente, Miguel Polo, ha recordado que con las lluvias de Semana Santa la CHJ ha ganado, en el volumen total embalsado, más de 100 hectómetros cúbicos que es "el equivalente a lo que consume València y su área metropolitana en un año". Pero este volumen se ha seguido almacenando solo en el sistema del Júcar y algo en el Turia, por lo que los sistemas que "estaban en mal estado, en situación de emergencia, siguen estando en esa situación".

El interior de Castellón, el más afectado

Así, las zonas más afectadas son el interior de Castellón, en municipios como Canet lo Roig, que son habituales por la propia geología de la provincia, y las comarcas de la Marina Alta por "la falta de precipitaciones importantes", aunque este déficit es "breve en el tiempo, no como la situación de 2016 cuando se arrastró una sequía más larga que provocó problemas serios en algún municipio".

Por contra, ha recordado que la situación para riego es diferente. En marzo la CHJ declaró la situación excepcional por sequía extraordinaria en toda la Demarcación ya que la falta de lluvias --el presente año hidrológico 2023-2024 está siendo el más seco de los últimos 33 años-- ha provocado que algunos sistemas (Palancia-Los Valles, Cenia-Maestrazgo y Marina Alta) se encuentren en un escenario de emergencia por escasez hídrica. Las posibles restricciones para el riego se decidirán en las reuniones de las secciones de la Comisión de Desembalse que se convocarán para el mes de mayo.