Alerta en los cítricos de Castellón: la plaga de la mancha negra se extiende y causa daños en todas las zonas de Túnez

El Comité de Gestión de Cítricos insiste en la importancia de mantener los controles en los puertos y que la UE no ceda ante los chantajes de Sudáfrica

Alerta en los cítricos de Castellón: la plaga de la mancha negra se extiende y causa daños en todas las zonas de Túnez

Alerta en los cítricos de Castellón: la plaga de la mancha negra se extiende y causa daños en todas las zonas de Túnez / Mediterraneo

Elena Aguilar

Elena Aguilar

La naranja no gana para disgustos. A la competencia de la fruta barata que llega de países como Egipto o Sudáfrica se une ahora la extensión de la plaga de la mancha negra por todas las zonas productoras de Túnez. Así lo ha denunciado este viernes el Comité de Gestión de Cítricos (CGC), que ha dado a conocer los resultados de un artículo científico en el que se concluye que, en menos de cinco años, esta enfermedad ya está totalmente extendida en las áreas citrícolas de este país y, de hecho, está provocando pérdidas de casi el 100% en las parcelas sin tratar.

El texto publicado en la revista Journal of Phytopathology y titulado Distribución geográfica, prevalencia e incidencia de la Mancha Negra de los cítricos causada por Phyllosticta citricarpa en Túnez, hace hincapié en en que no se trata de una detección anecdótica, y avisa del riesgo fitosanitario y económico que representaría su entrada en territorios citrícolas de la UE. Un trabajo que, además, se conoce en el momento más oportuno, justo después de que el Gobierno de Sudáfrica llamara a consultas en la Organización Mundial del Comercio (OMC) a la Comisión Europea (CE) para cuestionar la normativa comunitaria que pretende evitar que las importaciones de cítricos procedentes de países como Sudáfrica puedan estar contaminadas por este hongo. "Este nuevo estudio evidencia la necesidad de mantener e incluso reforzar estas medidas de control, basadas en tratamientos fungicidas e inspecciones en origen, así como la falta de credibilidad científica de los exportadores de este país y de sus autoridades", apunta la presidenta del CGC, Inmaculada Sanfeliu.

Las conclusiones de este artículo científico ratifican los sucesivos dictámenes elaborados por la EFSA (la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria), presentados en 2008, 2014 y revisados en 2018, que son la base científica que la CE utiliza para defender la normativa europea actual (ahora nuevamente cuestionada en la OMC) y que no solo se aplica a Sudáfrica sino también a Argentina, Uruguay, Brasil y Zimbaue, potencias exportadoras de cítricos que sufren esta enfermedad. Otro trabajo, también reciente, del Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA) ya acreditó mediante modelos matemáticos de posibles infecciones, la idoneidad climática de la cuenca mediterránea para el desarrollo de esta enfermedad.

Una plaga imposible de erradicar

El CGC explica, asimismo, que en este último artículo, como todos los anteriores realizados desde otras zonas del planeta afectadas, se confirma que no existe ningún caso exitoso de erradicación de la mancha negra tras su introducción. En todos estos países, son necesarios entre 4 y 6 tratamientos fungicidas al año para obtener un control aceptable de la enfermedad, algo que en el caso de la UE –con las restricciones fitosanitarias actuales más las derivadas de la Estrategia de la Granja a la Mesa- sería un objetivo casi imposible. El estudio tunecino pone el acento, de hecho, en que en las parcelas donde no se ha tratado con fungicidas, los daños se elevan casi al 100% de la cosecha.

El récord de interceptaciones en recintos portuarios europeos registrado en los últimos tres años –que la CE ha confirmado que en 2023 se elevaron a 48, a 32 en 2022 y a 43 en 2021- ratificaría, a su vez, que "el problema no es la normativa, es su incumplimiento reiterado, que lo único que pretende Sudáfrica con su acción ante la OMC es evitar que la CE les exija recurrir a los fungicidas eficaces (y más caros) que ya deberían estar usando o que los envíos a la UE se realicen solo desde zonas exentas –como ya les exije EEUU- o incluso retrasar una posible decisión sobre un cierre automático cuando los problemas vuelvan a repetirse esta próxima campaña”, señala Sanfeliu.

 De la gravedad de la afección del CBS da una idea la carta que, hace tan sólo unas semanas, dirigió la propia CE a las autoridades sudafricanas en su contestación a la llamada a consultas en el citado organismo internacional. Efectivamente, en este escrito el ejecutivo comunitario reseñó que el impacto económico resultante de la hipotética instalación de esta plaga en las zonas citrícolas comunitarias ascendería –según los estudios de la EFSA- a 1.182 millones de euros. Sanfeliu se pregunta a este respecto: "¿Se hablará ahora en la Organización Mundial de Cítricos del riesgo para la citricultura mediterránea evidenciado en este estudio?; ¿Y para la producción de limón español, única producción española integrada en dicha organización y copromotora de la misma junto a Sudáfrica?”.