El conseller de Agricultura, Juan Cotino, afirmó ayer que el principal planteamiento que el Gobierno central debe hacer en Europa para defender la citricultura ante la reforma de la OCM --Organización Común de Mercado-- es "regular la producción global, como hace con la remolacha o el algodón".

Cotino, que reiteraba así la propuesta lanzada por el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, y el de la región de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, defendió que "si tuviésemos una producción de cítricos regulada a nivel de Europa, si se dice que no vamos a plantar más en todos los países productores de la Unión, se lograría que los cítricos que ya hay se revalorizarán".

OTRAS MEDIDAS Por otra parte, el conseller de Agricultura apeló al Gobierno central y al Ejecutivo comunitario a crear un fondo para "poder intervenir en los mercados en momentos de crisis como el actual", con el objetivo de salvar la rentabilidad del sector y de los productores.

El responsable de Agricultura hizo un llamamiento a la responsabilidad del Gobierno para que "defienda de verdad los intereses de la Comunitat Valenciana y de sus citricultores ante Europa en estos momentos".

Cotino, además, se trasladará la próxima semana a Bruselas para defender la necesidad de incrementar los controles fitosanitarios para la importación de cítricos en el conjunto de la UE, con el objetivo de que "se exija a la fruta que llega aquí una garantía sanitaria y unos controles como el que nos piden a nosotros para exportar a EEUU".