Los responsables de la mezquita declararon su intención de buscar un nuevo local para el oratorio. Calificaron de hecho "sin precedentes" el cese de actividades decretado por el Ayuntamiento y lo consideraron un "recorte de las libertades religiosas". Asimismo, mostraron ayer su interés por nombrar a una nueva directiva y renovar la imagen de la entidad que, a su juicio, se ha visto distorsionada por estos acontecimientos. Las mismas fuentes consultadas expresaron su malestar por la repercusión que han tenido los arrestos y que se está traduciendo en un rechazo a la comunidad musulmana.