Con la jornada de ayer, la veda biológica de las embarcaciones de arrastre se inició en la provincia. Concretamente, son las naves de los muelles de Castellón las que no saldrán hasta el inicio del mes de septiembre. Mientras, los otros cuatro puertos de la provincia todavía irán a faenar el próximo lunes.

Con el comienzo de la parada regenerativa se pone fin a la primera parte de la temporada para la modalidad del arrastre. Un primer parcial marcado por las constantes protestas debido al aumento del precio del gasóleo. Tanto se han incrementado los gastos por el combustible, que el presidente de la Federación Provincial de Cofradías de Pescadores, Salvador Orero, indicó a Mediterráneo que si no cambia la perspectiva futura "habrá armadores que no podrán soportar los costes y no saldrán a la mar".

En el mismo sentido se refirió el patrón mayor de la Cofradía de Sant Pere, del Grao, quien señaló que dependerá "de las negociaciones de Bruselas", que se van a llevar a cabo este verano, buena parte del futuro del sector. Y todo reforzado por el previsible aumento continuo del gasóleo para los próximos meses. "Un sueldo nuestro es como el de hace 30 años", indicó.