Las oenegés de la provincia agudizan el ingenio para captar fondos y poder sobrevivir, ante el desplome de las subvenciones, los impagos y los problemas de las cajas de ahorros: eventos sociales, márketing solidario, implicar a empresas privadas, optar a concursos públicos, banca ética... son alternativas a las que recurren las entidades del tercer sector.

La Xarxa de Xarxes del Tercer Sector d’Acció Social i Cooperació al Desenvolupament se reunió anteayer para pedir al conseller de Justicia, Jorge Cabré, que no se recorten las ayudas respecto a las del pasado año y que se concrete el pago de la deuda pendiente.

“Los responsables políticos se deben concienciar de la necesidad de pagar la deuda a las entidades del tercer sector porque el retraso en los pagos genera un descubierto”, insistía Francisco López, presidente de Patim.

Ello, por no hablar del complicado acceso a la financiación a través de la obra social de las cajas y a que acceder a líneas de crédito por parte de los bancos con avales de la Conselleria se ha convertido en misión imposible.

Desde la Plataforma del Voluntariado de la Comunitat explicaban que la búsqueda de alternativas es un hecho, para reducir la dependencia de las oenegés respecto de los fondos públicos y citaba como ejemplos acciones como el márketing solidario, consistente en pedir aportaciones económicas voluntarias a través de páginas webs, o la organización de eventos de todo tipo.

DONATIVOS POR SMS // Ejemplo de ello es la Fundación Borja Sánchez para niños con lesiones cerebrales. Por su juventud aún no puede optar a subvenciones públicas. Por eso, recurren a eventos benéficos, como desfiles de moda, o a alternativas innovadoras, como la recepción de donativos a través de SMS solidarios o apelando a la responsabilidad social corporativa con el llamado teaming. Este consiste en el que la empresa invita a los empleados a colaborar con una oenegé aportando un donativo de su nómina a un proyecto solidario y la empresa dona el mismo importe que sus trabajadores.

Carlos Laguna, presidente del Cocemfe, planteaba “como línea de financiación alternativa” competir con el mercado privado en la prestación de servicios como el transporte adaptado. “No descartamos montar uniones temporales de empresas para poder prestar servicios”, agregaba.

Mientras, Paco López apostaba por una banca ética en la que el ciudadano tiene derecho a decidir a qué proyectos pueden ir los beneficios que genera.

Aun así, las oenegés reconocen la excesiva dependencia de las ayudas públicas. López recordó que la X solidaria se ha convertido en un balón de oxígeno para muchas oenegés. El año pasado los contribuyentes de la provincia donaron más de tres millones de euros a fines sociales. H