El alcalde de Castellón, Alfonso Bataller, firmó ayer con los tres sindicatos mayoritarios en el consistorio el nuevo convenio laboral, que afectará a casi 1.200 empleados municipales hasta finales del 2015. La adhesión al acuerdo de los sindicatos UGT, CCOO y CSIF garantizará la paz social en los próximos dos años dado que representan al 89,98% de la plantilla.

El texto del convenio --que también respalda el Bloc-Compromís frente al rechazo del PSPV-PSOE y del sindicato USO-- lo rubricaron por la parte de los trabajadores municipales Fernando Moliner (CCOO), Francisco Carbó (UGT) y Jorge García (CSIF).

CLÁUSULA // Además de todos los aspectos del convenio desglosados en los últimos días por Mediterráneo, el documento incorpora una cláusula que compromete al equipo de gobierno a priorizar en sus ofertas de empleo público la consolidación de 131 puestos de trabajo que ahora mismo desempeñan personal interino. En concreto, 70 empleos de brigada de obras y agentes de movilidad urbana, todos del grupo E --el más bajo del escalafón laboral--; 47 de policías locales; y otros 14 más de la banda de música. El concejal de Recursos Humanos, Juan José Pérez Macián, aceptó en el transcurso de las más de 25 reuniones de la negociación esta propuesta, lanzada por los representantes de Comisiones Obreras (CCOO).

Precisamente a esa flexibilidad en la negociación aludió ayer repetidas veces el alcalde minutos antes de firmar el convenio. “Estamos ante un acto importante para el buen funcionamiento del Ayuntamiento, la voluntad de consenso ha prevalecido en estos momentos duros de adversidad económica en los que he tenido que aprobar medidas que no me han gustado”, afirmó.

El edil de Recursos Humanos del consistorio castellonense admitió que el convenio da continuidad a la política de contención del gasto salarial de los últimos años. “El capítulo 1 llegó a alcanzar 54 millones de euros hace algunos ejercicios y ahora estamos en 49 millones, algo que hemos logrado amortizando plazas a medida que hay jubilaciones, incorporando a la sanidad pública a algunos funcionarios y reduciendo el pago de horas extraordinarias”, enumeró. “Hace tres años se pagó un millón de euros y ahora estamos en 350.000 euros anuales”, añadió.

Los tres representantes sindicales coincidieron en admitir que el nuevo convenio es peor para los empleados municipales que el anterior. “Solo durará dos años porque confiamos que en 2015 se vean los brotes verdes y podamos firmar otro convenio mejor”. H