Los API prevén un repunte de ventas de pisos por la plusvalía

Las inmobiliarias de Castellón prevén un repunte de los propietarios de viviendas de segunda mano que, antes de fin de año, intentarán venderlas con el fin de esquivar la mayor carga de impuestos que supondrá tributar la plusvalía con Hacienda, a partir del 1 de enero del 2015, según prevé la nueva reforma fiscal --en trámite parlamentario--.

Y es que quienes vendan propiedades compradas antes del 31 de diciembre de 1994, a la hora de tributar, si cierran la operación a partir del 2015, tributarán más por ello, “hasta un 30% más, que si lo hacen este 2014”, explicó la vicepresidenta del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Castellón (Coapi), Nuria Marco. Esto sucederá porque la nueva normativa ya no tendrá en cuenta los coeficientes de inflación y abatimiento, que permitían reducir en un porcentaje el impuesto y actualizaban valores; y que al eliminarlos harán que se tribute más por la plusvalía, con independencia de la antigüedad.

Y es que, por ejemplo, un piso comprado por diez millones de pesetas en los años 70, entonces significaba una cantidad de dinero mucho mayor en peso que los 60.000 euros de ahora.

El delegado de la Asociación Profesional de Asesores Fiscales de Castellón, Luis Chinchilla, puso como ejemplo una vivienda por la que se llega a cuadruplicar la cantidad a pagar en impuestos de la compra --ver gráfico--.

VENTA Y DONACIONES // Chinchilla apuntó además que afectará a donaciones. “En una venta onerosa, el sujeto obligado al pago es el vendedor; y si es una donación o transmisión lucrativa, también afectará, y quien paga es el donante”, explicó el asesor.

En opinión de los API, en cuanto el propietario se informe de la nueva normativa a buen seguro “va a precipitar ventas” y alterará el mercado de precios, pues la diferencia en impuestos es considerable, indicó Marco.

JUBILADOS Y PARADOS // Con todo, Marco recordó que “la defensora del Pueblo, Soledad Becerril, ya ha mostrado su preocupación por el alza de tributos para el ciudadano a la Secretaria de Estado de Hacienda; así como los casos de contribuyentes que puedan verse obligados a vender su vivienda por una situación de dificultad económica, “como jubilados o desempleados”. H