Fomento sí liberó la autopista en casos similares a la Vall

El Ministerio de Fomento sí encontró más soluciones para evitar los atascos y problemas de circulación en otros casos similares al de las obras de la autovía A-7, que desde el martes sufre retenciones en la zona de la Vall d’Uixó. Partidos políticos, organizaciones de consumidores, la asociación provincial de transportistas e incluso ayuntamientos, como el de Almenara, han intensificado estos días su reclamación para la liberalización de la autopista AP-7, al menos entre los dos peajes más cercanos a la Vall (Sagunto y Moncofa), para evitar las molestias a los usuarios de la Autovía del Mediterráneo, una carretera «que ya estaba de por sí saturada antes de las obras», como recuerda el portavoz de la Unión de Consumidores de España en Castellón, Juan Carlos Insa.

Por poner algunos ejemplos: Fomento autorizó en el 2011, en Galicia, el desvío del tráfico a la autovía A-8 por unas obras en la carretera N-634 entre las localidades de Mondoñedo y Lourenzá; en el 2010, el Ministerio abrió también la circulación por las autopistas AP-68 y AP-2, en Zaragoza, debido a los altos índices de siniestralidad de la N-232 entre Figueruelas y Mallén, y de la N-II, entre Zaragoza y Fraga. De ello se beneficiaron casi 700.000 vehículos en el primer año. Más casos: el año pasado, Fomento y la Generalitat de Cataluña llegaron a un acuerdo para bonificar, hasta la mitad de su coste, el viaje de camiones por la AP-7 entre Girona y Francia debido a la prohibición de circular a los vehículos pesados en la N-II por unas obras para duplicar esta calzada.

precedentes en Castellón // Incluso hay casos de soluciones más eficientes --más allá del desvío a la N-340 que es la alternativa que ha dado Fomento a las obras en la Autovía del Mediterráneo en la Vall-- en la provincia. En el 2004, el acuerdo fue entre el Ministerio y los ayuntamientos de Castellón, Benicàssim y Orpesa, que durante el mes de agosto permitieron circular a los camiones de forma gratuita (a unas horas determinadas) por la autopista para reducir el tráfico en la colapsada nacional 340. Y en el 2014, el Ministerio y la Generalitat acordaron bonificar hasta en un 50% la circulación de camiones por la AP-7 entre Sagunto y Torreblanca por el cierre de la N-340 a los vehículos pesados.

Lamentablemente, los transportistas ya no se pueden beneficiar de esta bonificación. Por ello, y por las evidentes molestias que provocan las obras en la A-7 a sus empresas, desde la asociación provincial, Actm, van a estudiar en una junta general «si podemos solicitar la liberalización de la AP-7, al menos mientras duren las obras y como mínimo para los camiones», señala su secretario general, José Ramón López.

demanda habitual // Como recuerda López, «llevamos la Virgen solicitando la liberalización». Pero esto no ha provocado un cambio en el Gobierno, que no contempla adelantar la apertura de la autopista al tráfico, prevista para el 1 de enero del 2020 --cuando finaliza el contrato, que tras la prórroga alcanza ya 48 años--.

Insa también incide que la única alternativa «razonable» para desviar el tráfico es «la autopista», ya que la N-340 «se ha quedado como una carretera vecinal», puesto que atraviesa núcleos urbanos. Por eso pide, al menos, la bonificación del peaje: «No puedes desviar y encima exigir que la gente pague», concluye. H