Marzo y abril solían ser meses buenos para el empleo en Castellón. Las fiestas de la Magdalena en la capital, Fallas en municipios como Benicarló, Burriana o la Vall d’Uixó, y la Semana Santa, con el tirón del turismo, tradicionalmente han provocado un acelerón del mercado laboral. Pero este año todo va a ser muy diferente. La crisis del coronavirus está cambiándolo todo y su impacto en el empleo no tardará en aparecer. Sindicatos y empresarios dan por hecho que las contrataciones se resentirán (en sectores como la hostelería ya lo están haciendo) y que ese frenazo podría acabar perjudicando a todas las actividades, desde bares y agencias de viaje a comercios, desde empresas de la construcción a industrias.
Pero, ¿cuántos contratos se van a tambalear en Castellón? Durante los meses de marzo y abril del año pasado, las empresas de la provincia generaron 33.832 contrataciones, según datos del Ministerio de Trabajo. De esa cantidad, el 86% eran de carácter temporal y el 70% los acaparó el sector servicios. Y otro apunte más: durante todo ese periodo restaurantes y establecimientos comerciales contrataron a casi 12.000 nuevos profesionales en la provincia, unos números que con toda seguridad ahora no se repetirán. Los bares y restaurantes han cerrado sus puertas ( hay hoteles de la costa que han anunciado que no abrirán hasta el próximo junio) y eso convertirá marzo y abril en dos meses negros para el mercado laboral.
TODA LA ECONOMÍA AFECTADA // Sebastián Pla, presidente de la Confederación Empresarial Valenciana (CEV) en Castellón, asegura que aunque todavía es pronto para dar cifras «es evidente que la economía provincial se verá afectada» por la situación extraordinaria que está viviendo el país y más, si se tiene en cuenta la situación especial que se ha generado en Castellón con la suspensión de la semana de la Magdalena. «Todo eso se traducirá en numerosas pérdidas para el sector turístico y de ocio y en una reducción de los puestos de trabajo», insiste Pla que reclama a las administraciones «la implementación de medidas urgentes que permitan aligerar la carga fiscal a las empresas en este período, así como facilitar líneas de crédito y ayudas».
Los sindicatos coinciden en el diagnóstico e insisten en que, de manera inmediata, el sector que más se resentirá es el turístico. «La creación de empleo temporal en ese sector será nula», afirma Francisco Sacacia, secretario general de UGT en Castellón, que explica también que, hasta la fecha, en la industria azulejera «hay normalidad en el empleo».
Pese a que de momento en la industria provincial reina la tranquilidad (el sector da empleo en Castellón a algo más de 45.000 personas), todo el mundo da por sentado que la crisis del coronavirus se acabará notando más pronto que tarde. «Nos preocupa especialmente el posible descenso de la actividad en el sector industrial, derivado de la caída de las exportaciones y las importaciones o carencia de materias primas», dice el máximo responsable de la CEV en Castellón que aboga por concretar, de manera urgente, protocolos de actuación que permitan a las empresas la continuidad de producción y garantizar su supervivencia.
Un ALUVIÓN DE ERTES // Las nuevas contrataciones se van a frenar en seco y, además, el paro se disparará. Castellón cerró febrero con 39.432 desempleados y 236.203 afiliados a la Seguridad Social, unos número que podrían cambiar en las próximas semanas. Tanto la CEV como los sindicatos auguran que empresas de distintos sectores empezarán a aplicar regulaciones temporales de empleo. La patronal ya ha planteado al Gobierno agilizar el procedimiento de los ERE temporales (ERTE), acortar plazos y suspender la cuota a la Seguridad Social cuando no haya actividad. UGT y CCOO aseguran que estarán vigilantes para que «esos ERTE no se conviertan en despidos».
Quienes también están recibido estos días un aluvión de consultas son los abogados laboralistas de la provincia. «Hay trabajadores, pequeñas empresas y autónomos que nos están llamado para preguntarnos sobre los requisitos que hay que cumplir para poder plantear un ERTE y también asesorarse sobre lo que tienen que hacer para acogerse a las moratorias en el pago de impuestos anunciadas por el Gobierno», explica Maribel Marca, del despacho de abogados Marca Claramonte de Castelló.
