Son el colectivo más vulnerable frente al coronavirus, por eso, son los primeros en el plan de vacunación acordado por las comunidades y el Gobierno central. A pesar del orden establecido, primero residencias, después sanitarios y grandes dependientes, la realidad es que, actualmente, todavía hay geriátricos y centros de diversidad funcional sin recibir la primera dosis de la vacuna frente al covid. Un retraso que se sucede a la vez que aumenta la cifra de residentes fallecidos. Hasta este martes habían perecido por covid-19 un total de 197 usuarios de estos centros en la provincia, casi 30 de ellos en los últimos 10 días.

Actualmente, hay en Castellón 18 centros con algún caso positivo, de los cuales seis están intervenidos por la Conselleria de Sanitat. Una de las residencias que está siendo vigilada por el Gobierno autonómico es la de la Saleta Magdalena, donde en las últimas semanas se ha registrado un brote que ha afectado a cerca de un centenar de usuarios, casi la totalidad de residentes, según confirman desde el sindicato CCOO. Este virulento foco de contagio ha supuesto el fallecimiento de una veintena de personas, según constatan las mismas fuentes.

Desde la Saleta evitaron confirmar dicha información y se limitaron a afirmar que el brote detectado ya está bajo control, al tiempo que declinaron facilitar cualquier dato sobre el número de decesos de acuerdo «a la ley de protección de datos».

Asimismo, derivaron a Salud Pública la competencia de ofrecer datos al respecto. Actualmente, y tras diez meses de pandemia, la Conselleria de Sanitat sigue sin facilitar un listado concreto sobre los fallecidos que se han registrado en cada residencia a causa del coronavirus.

La residencia la Saleta, según CCOO, todavía no ha recibido la primera dosis de la vacuna debido a que cuando se inició la campaña tenían ya positivos detectados, por lo que se demoró y, hasta ayer, no había sido inmunizada.

Tampoco ha sido vacunada todavía la residencia de Cabanes, que debía haber recibido hace unas dos semanas la primera dosis, que tuvo que paralizarse al no disponer de suficiente estoc y destinar los inyectables disponibles a administrar segundas dosis.

Malestar por la vacunación

Y es ahí donde radica el malestar creciente de la Asociación Empresarial de Residencias y Servicios de Atención a la Dependencia de la Comunitat (Aerte), quien ayer acusó de nuevo al departamento de Ana Barceló de «incumplir» su propio protocolo de vacunación al «enviar de nuevo primeras dosis a personal sanitario sin haber llevado a cabo la vacunación completa de las 6.200 personas que se encuentran pendientes de recibir la primera dosis en residencias».

La patronal del sector ya ha informado de esta circunstancia a la fiscal coordinadora de la sección Civil de Valencia, Ana Lanuza, quien se encarga de la supervisión en las residencias a nivel autonómico. «Nos comentó que lo veía preocupante e imagino que solicitará a Sanitat la información pertinente», señala el presidente de Aerte, José María Toro.

Aerte destaca que la justificación ética de esa priorización fijada por la Estrategia de Vacunación frente al covid-19 en España es la tasa de mortalidad que sufren las personas mayores de 80 años que sitúa en torno al 20%, la mayor de todos los grupos de edad. Por lo tanto, «debe garantizarse la vacunación del grupo 1 antes de seguir enviando nuevas dosis al personal sanitario de primera línea».

«La situación epidemiológica de la Comunitat es la más grave de toda España según los distintos indicadores del Ministerio de Sanidad, lo que hace aún más necesario acelerar el proceso de vacunación ya que se somete a un riesgo elevadísimo a las personas más vulnerables al virus, las mayores de 80 años», ha advertido.

Por su parte, la propia consellera, Ana Barceló, defendió en su comparecencia del pasado martes que se estaba cumpliendo el plan de vacunación establecido, así como el orden a seguir. De todos modos, la consellera de Igualdad y vicepresidenta, Mónica Oltra, criticó que ante se estuvieran vacunando a administrativos y jardineros de hospitales que a residencias de mayores.