Hasta 115 alegaciones presentadas durante el periodo de exposición pública de la retirada de la Cruz de los Caídos del parque Ribalta de Castelló avalan su supresión de la ubicación actual. Así resultan los datos del procedimiento activado por la Concejalía de Memoria Democrática en el mes de mayo.
Los apoyos a la retirada, según las cifras ofrecidas por el propio consistorio de la capital de la Plana, representan el 67% de los documentos presentados en tiempo y forma, que suman 170 escritos en total de la ciudadanía, asociaciones y formaciones políticas que han manifestado su posicionamiento sobre la actuación proyectada relativa al monumento. Entre ellas se encuentran otras 55 alegaciones que reclaman mantener la Cruz en su emplazamiento original.
Respuesta
El Ayuntamiento deberá dar respuesta a las diferentes posturas en los próximos meses como parte del nuevo procedimiento que activó para asegurar que todas las partes interesadas fueran conocedoras de los nuevos documentos que aportaban relevancia y se consideraban esenciales en este proceso. En él se incluye el informe emitido por la Dirección General de Calidad Democrática en abril que determina que “el Ayuntamiento de Castelló tendrá que proceder a su retirada, mediante autorización por la Conselleria competente en materia de patrimonio cultural, teniendo en cuenta que este símbolo se encuentra situado en un parque público declarado Bien de Interés Cultural".
En esta resolución se especifica que el monumento es “un elemento contrario a la memoria democrática, de acuerdo con los artículos 39.1 y 6 de la Ley 14/2017, de 10 de noviembre, de la Generalitat, de Memoria Democrática y para la convivencia de la Comunitat Valenciana".
La concejala responsable del área, Verònica Ruiz, también se reunió recientemente con el vicario general de la Diócesis Segorbe-Castelló para trasladar el ofrecimiento de la cruz latina que forma parte del monumento, tal como recoge la recomendación del informe del secretario general de la administración municipal.
