Sales garantiza ayuda de la Unión Europea para las Zonas de Bajas Emisiones

El ejecutivo asegura que cumplen con el proyecto tras solicitar la ampliación del plazo

El portavoz del equipo de gobierno, Vicent Sales, durante un pleno.

El portavoz del equipo de gobierno, Vicent Sales, durante un pleno. / Mediterráneo

C. González

El portavoz del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Castelló, Vicent Sales, ha defendido que «no está comprometido el dinero de Europa como intenta hacer creer el PSOE» en respuesta a la advertencia de los socialistas que aseguraban que estaban en riesgo 11 millones de fondos europeos por las modificaciones en el proyecto de la zona de bajas emisiones (ZBE).

«Castellón cumple con la Zona de Bajas Emisiones cuyas obras ya han empezado y tras haber solicitado la ampliación para poder ejecutarlas hasta diciembre de 2025», explicó Sales desde el ejecutivo de Partido Popular y Vox, reprochando a los socialistas sus «rabietas constantes y campañas de desprestigio porque no aceptan que los castellonenses les hayan puesto en la bancada de la oposición», ha sentenciado. 

El portavoz del gobierno municipal también se ha referido al procedimiento abierto por el Defensor del Pueblo, el cual también implica a otras ciudades españolas: «Recabada toda la información, se envió contestación formalmente el 23 de noviembre. La documentación está en regla y ya hemos iniciado las obras por la zona norte», ha comentado Sales.

El edil ha hecho hincapié además en la moratoria solicitada el pasado 29 de julio al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana para ampliar el plazo de ejecución de la zona de bajas emisiones hasta diciembre del 2025, aludiendo a causas sobrevenidas, ajenas al Ayuntamiento. «Tenemos la conformidad del Ministerio de que toda la documentación presentada cumple con los requisitos para solicitar esta ampliación del plazo, para poder llevar a cabo la ejecución hasta diciembre de 2025», ha remarcado.

Las causas esgrimidas por el ejecutivo se basan en la «complejidad y gran envergadura» de los expedientes de contratación, la adopción de nuevos requisitos por un real decreto y las elecciones municipales de mayo.

Con todo, la Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Castellón aprobó el pasado 20 de septiembre el nuevo proyecto de la zona de bajas emisiones. Los cambios suponen que los 745.000 metros cuadrados que conformarán dicha zona solo sufran restricciones al tráfico de forma temporal en algunas calles cuando así lo requieran las mediciones de la calidad del aire y hasta que se recuperen niveles óptimos. También se conservarán 200 plazas de aparcamiento en este entorno.