TRAS DOS AÑOS DE INTERRUPCIÓN

Castellón prepara la vuelta de arcillas de Ucrania para la cerámica

Desde PortCastelló confirman el interés de varias empresas por recuperar el tráfico

Instalación de arcillas en una industria cerámica de Onda.

Instalación de arcillas en una industria cerámica de Onda. / Mediterráneo

Bartomeu Roig

Bartomeu Roig

Han pasado ya más de dos años desde que Rusia comenzara su intento de invadir Ucrania. Un hecho que ha tenido un fuerte impacto en la industria cerámica de Castellón. No solo por la incertidumbre económica global, tras el aumento de los precios energéticos, sino por el hecho de que Ucrania era el principal suministrador de arcillas para las azulejeras.

Desde el estallido del conflicto bélico el sector se puso a trabajar en conseguir materias primas alternativas, de modo que en estos momentos Portugal o Rumanía han pasado a ser proveedores de referencia.

Producto nacional

También se ha reforzado el trabajo para explotar minas nacionales, como las de Teruel. Pese a todo, hay una serie de productos, como las láminas de gran formato, en las que es necesario disponer de unas arcillas de características muy parecidas a las que ofrecía Ucrania, y que la mayoría de yacimientos alternativos no pueden ofrecer. Por todo ello, hay compañías que trabajan para tratar de recuperar parte de la actividad perdida con el país en conflicto.

Impulso

Lo señala el presidente de la Autoridad Portuaria de Castellón, Rubén Ibáñez: «Nos consta que hay interés, y algunas empresas están impulsando este regreso». Desde el inicio de la guerra las empresas de cerámica han administrado sus materias primas, con el fin de que el estoc de arcillas de Ucrania durase el mayor tiempo posible. Debido a esto se han hecho mezclas de estas arcillas con las procedentes de otros lugares. Pasados dos años sigue habiendo existencias, pero se plantea aumentar las reservas, al tiempo que se quiere recuperar la actividad comercial tras un conflicto internacional muy largo, y que nadie es capaz de vaticinar cuándo terminará.

Más tráfico

Además, para Ibáñez, «sería muy importante para el puerto de Castellón, que busca incrementar su tráfico de contenedores y arcillas», para recobrar posiciones tras un 2023 marcado por un descenso de la actividad.

A pesar de los preparativos confirmados por Ibáñez, el presidente del puerto expone que por el momento no hay aún fechas programadas. Además, no parece probable que se recuperen las cifras llegadas antes de la guerra. Fuentes consultadas indican que esta operación «entraña riesgos, los costes son mucho más elevados y hay que suscribir seguros especiales». Detalles que recuerdan que la guerra no ha finalizado.