La solución a la falta de urbanización del paraje Boverot-Santa Quitera llegará el próximo mes de septiembre, fecha que el Ayuntamiento de Almassora ha previsto para contar con un borrador del proyecto, según el alcalde, Vicente Casanova.

El objetivo de esta iniciativa es regularizar la situación de las más de 800 viviendas existentes, así como por permitir nuevas edificaciones en este área de 1.264.652 m. La legalización de estas construcciones es una reivindicación histórica de los residentes en esta zona residencial --definida como Sunpor-3 en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) aprobado en 1998--.

Este espacio está delimitado por el río Mijares, La Rambla de la Viuda y el eje Betxí-Borriol, así como la carretera N-340 que, junto con los polígonos industriales, la separan del casco urbano. En definitiva, se trata de un espacio que, en la mayoría de los casos, mediante construcciones ilegales, actúa como destino de segunda residencia en verano aunque en los últimos tiempos se ha convertido en fija para muchos.

El edil popular avanzó que el citado proyecto, cuya redacción está elaborando un gabinete externo, "conserva en gran medida las edificaciones existentes y las dota de viales, agua potable, luz pública y alcantarillado".