La Subdelegación del Gobierno en Castellón desmintió ayer el último de los hechos delictivos en viviendas de Alqueries, ocurrido en una casa de la calle Bellaguarda el miércoles, como denunció a este rotativo un portavoz de un grupo de vecinos de esa zona, mientras que, por su parte, los dueños de la vivienda confirmaron ayer el asalto a la misma.

Mientras la Subdelegación del Gobierno ratifica que no se cometió un robo (atestado de la Guardia Civil realizado ayer, documento anexo), los propietarios de la última vivienda afectada, que prefieren guardar su identidad, confirmaron ayer a Mediterráneo que cuando el miércoles llegaron a su domicilio, a las 21.00 h., vieron que alguien "podía haber entrado en la parte exterior de la casa, en la terraza, porque estaba todo revuelto, aunque, por lo que sea, no llegaron a entrar en el interior de casa", por lo que no creen que fuera obra del viento, como apunta el informe de la Guardia Civil.

Por ello, llamaron a la Guardia Civil y "una patrulla de Burriana se personó allí esa misma noche", según explicaron los dueños de la vivienda. Sin embargo, no formalizaron la denuncia "porque no se llevaron nada de valor, sino alguna toalla de playa que había fuera". "Por la mañana --prosiguieron-- volvió la Guardia Civil y nos reiteró si queríamos presentar denuncia, pero les dijimos lo mismo que a sus compañeros".

Fuentes próximas a la Subdelegación y el PSOE apuntan que detrás de las declaraciones de algunos vecinos de esa zona de la localidad se encuentran "personas que no han sabido digerir la victoria socialista en las últimas elecciones". La alcaldesa, Consuelo Sanz (PSPV), dijo que "es innegable que han sucedido más de 40 robos este año y que han entrado con los dueños durmiendo, yo tengo igual de miedo que el resto de vecinos, pero hay un dispositivo especial y una investigación".

"No tenemos dinero para poner 40 policías , prosiguió Sanz, quien cree que tras "el interés de publicitar cada robo existe una trama política, y no hablo de todos los vecinos que han sido víctimas de robo".

Por contra, el concejal popular Agustín Molés dijo que ellos no tienen nada que ver con la supuesta trama. "Nos están acusando de que nosotros estamos detrás de los vecinos y no es cierto; 43 robos es bastante más grave de todo lo que están diciendo el subdelegado del Gobierno y la alcaldesa", manifestó. "Es indigno que la alcaldesa y el concejal de Policía den a los vecinos un número de teléfono de la centralita por si sucede algo y ésta esté tres días rota, y es indigno relacionar los robos con que los vecinos dejan la puerta o la ventana entreabierta", añadió.

La avería de la centralita ha llevado a algunos propietarios de viviendas de la urbanización el Molí a anunciar (mediante un comunicado remitido a este periódico) la interposición de acciones judiciales contra el Ayuntamiento, pues afirman que por ello los propietarios de la casa asaltada el pasado viernes no pudieron comunicar con Policía.