El Bloc Nacionalista Valencià ha decidido sumarse también a las protestas por el gasoducto. Su representante en Vinaròs, Domènec Fontanet, dijo ayer que "el pasado 22 de agosto nuestro partido ya entregó las alegaciones en la dependencia del área de Industria y Energía de la Subdelegación del Gobierno". Fontanet asegura que "vistas las dimensiones de la planta de transformación y sus características, podemos asegurar que afectarán negativamente a la economía y el turismo de la zona, y a la seguridad de los vecinos". Los nacionalistas han presentado tres alegaciones: una sobre el suelo no urbanizable, otra por no respetar la distancia de 2.000 metros, y la última por el posible impacto ambiental.
