La restauración de la calle Santa Rosa del cementerio de Vinaròs culminará en Pascua. Así lo ha anunciado el edil de Servicios municipales, Agustín Guimerá, quien ha avanzado que será tras la misa de difuntos del día de Todos los Santos, donde se bendecirán los restos situados en esta zona, cuando comiencen los trabajos de traslado previos al inicio de la actuación en esta calle, prevista para el 3 de noviembre.

De este modo se pone fin a "unas obras que han transcurrido legislatura tras legislatura sin que ningún gobierno local las acometiese", critica Guimerá. Y es que algunos de estos nichos datan de finales del siglo XIX. Además, su ubicación, en la parte de Levante, ha provocado humedades que han contribuido a que esta zona del cementerio obtuviera la declaración de ruina.

El proyecto cuenta con un presupuesto inicial de 204.795 euros, y el Ayuntamiento correrá con otros gastos, como los del traslado de los restos.

El edil opina, además, que "quedarán nichos vacíos, con lo que la gente que disponga de uno en la Santa Rosa podrá optar a renovar la concesión".

El consistorio ha construido 200 columbarios con la finalidad de que acojan un tiempo los restos extraídos, hasta su ubicación definitiva en los nichos correspondientes, "aunque hay familias que disponen de nichos en otras calles y quieren que los restos sean depositados en ellos, renunciando al derecho funerario que pudieran tener sobre el mismo", explica el concejal.

Los restos que no sean reclamados serán depositados en un osario, aunque, como puntualiza el edil, "intentaremos por todos los medios ponernos en contacto con la familia". En este sentido, Guimerá agradece la actitud de la oposición en el tema".

Con el 90% de las familias de acuerdo, Guimerá explica que "las ocho alegaciones presentadas han sido desestimadas jurídicamente, aunque me gustaría tener el consentimiento moral de todas las familias".