Los 65 trabajadores afectados por el expediente de regulación de empleo presentado por el grupo empresarial Orero de Benicarló se muestran “escépticos” con el gerente del conglomerado, Juan Orero, y su promesa de que pagará los salarios pendientes.

Además, temen que los sueldos sin cobrar desde mayo y las indemnizaciones por despido las pague el Fogasa y no la mercantil. Así lo expresó ayer el portavoz de los empleados, Sergio Bou, a sus compañeros durante la reunión que mantuvieron en el Mucbe.

Para Bou, “si el juez ordena a Orero pagar y este se declara insolvente, las cantidades las deberá de abonar el Estado, por lo que solo será un porcentaje”, indicó.

El grupo está formado por cuatro firmas y el ERE afecta a empleados de las cuatro. Además, la cantidad adeudada podría ascender a tres millones de euros, dependiendo de los días por año trabajado que el tribunal marque se han de abonar a los denunciantes. El ente, dedicado al sector naval, se queda ahora con menos de la mitad de la plantilla.