Una monumental entrada de dragones, procedentes de varios puntos de la Comunitat Valenciana y Cataluña, puso anoche el punto final a un animado fin de semana en Cervera, con la cuarta edición de su Trobada de Dracs i Bèsties de Foc. Fue en este momento cuando los espectadores vieron en plena acción a estas piezas de cartón piedra, que perpetúan las tradiciones medievales. La actividad contó con otros alicientes, como la participación de varias escuadras de los Moros i Cristians del Perelló, en Valencia; y los gigantes de Alcalà de Xivert. El acompañamiento musical vino de la mano de las bandas de Cervera y Santa Magdalena.
El alcalde, Adolf Sanmartín, hizo un balance “plenamente satisfactorio” del encuentro, que tras cuatro años “ya se encuentra plenamente consolidado, y que tiene una gran capacidad de convocatoria, al ser algo único y singular dentro de la provincia de Castellón”. Sanmartín calcula que durante el fin de semana “se han acercado más de 6.000 personas a nuestra localidad, algo que ha tenido un gran efecto sobre los cinco restaurantes de Cervera, que no pararon desde el sábado”.
mercado // La programación se completó con un mercado medieval, en el que se dispusieron puestos de productos artesanales, y recorridos por el patrimonio local. Los niños disfrutaron de espectáculos dedicados a ellos. La plantà de dragones, frente a las piscinas, fue uno de los principales alicientes, al permitir ver de cerca estas creaciones. H
