La calle Irta de Alcossebre mejorará las condiciones del tráfico rodado en este núcleo urbano tras las obras del tercer tramo de ampliación, que han dado comienzo en los últimos días. Mediante esta inversión impulsada por el Ayuntamiento de Alcalà de Xivert, con un importe de 25.000 euros, todo el vial contará con cinco metros más de anchura, de modo que se dispondrá de más espacio para el paso de vehículos.
Las tareas culminan el plan iniciado a finales del pasado año, cuando se ejecutó el primero de los tramos, en las inmediaciones de la plaza la Mola. Posteriormente, se ha seguido incrementando el espacio de la calzada. De este modo se gana capacidad a la hora de conectar la avenida Blasco Ibáñez con la carretera de acceso desde la N-340.
El alcalde, Francisco Juan, detalla que uno de los objetivos perseguidos con esta medida es «mejorar la distribución de los aparcamientos en la zona». Una vez acabe la ejecución, en las próximas semanas, plantearán un estudio para reordenar la circulación, que permita una movilidad más eficiente dentro del centro de Alcossebre.
Anteriormente, en el año 2014, ya se hizo un trabajo similar en la cercana avenida Castellón, para lo que destinaron cerca de 300.000 euros de recursos propios del consistorio. Al igual que en la calle Irta, su trazado es paralelo a la costa y posibilita conectar el acceso de este destino con las diferentes urbanizaciones, especialmente, en los meses de más afluencia de visitantes.
