Con una inversión inicial de 18.000 euros, el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Benicàssim propondrá mañana en el pleno la reposición de las pasarelas de las playas, a través de la bolsa financiera del remanente de tesorería, dentro del plan para que estos elementos sean de hormigón impreso. «Es la opción más adecuada y viable, además de contar con la autorización de Costas. Nuestro objetivo es sustituir la madera de forma progresiva, por su enorme coste de mantenimiento», explica la concejala de Playas, Elena Llobell.

La alcaldesa, Susana Marqués, destaca que continúan con la línea que venían «desarrollando en la anterior legislatura». «Somos conscientes de que las playas son el principal activo y reclamo turístico de la localidad, por ello seguiremos trabajando para que la costa disponga de los mejores servicios y un correcto plan de mantenimiento», puntualiza.

BALANCE // El consistorio ha invertido desde el 2015 un total de 237.500 euros en las infraestructuras de las pasarelas de madera. En concreto, desarrollaron trabajos de reparación, sustitución y mantenimiento de más de 4.000 m2 de recuperación de las tarimas, con 140.000 euros de gasto, y también para la sustitución de 435 metros por pasos de hormigón impreso, con una inversión de algo más de 77.000 euros.

Por otro lado, Llobell aprovecha para recriminar al Consell el «retraso» para aportar y poner en valor recursos turísticos en los municipios de la Comunitat con playa. «Que cumplan con Benicàssim. Hemos rebasado el ecuador de la temporada y no pueden llegar en noviembre, como pasó el pasado año», recalca la edila.

La localidad apuesta por las intervenciones en el litoral que le permiten optar a la renovación de sus cinco banderas azules.