Todos los grupos con representación municipal en Peñíscola (PP, PSOE, Compromís y Ciudadanos) votaron a favor de una moción presentada en el último pleno que insta al Gobierno central a realizar un informe geológico «con carácter urgente» que detalle el estado del tómbolo del castillo tras los últimos desprendimientos. Además, el documento pide a la Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y del Mar, que depende del Ministerio de Transición Ecológica, que adopte las medidas necesarias para «reparar el daño y el deterioro» que presenta el acantilado de la zona este. El objetivo de esta reivindicación, según fuentes municipales, es garantizar la estabilidad y la seguridad de la estructura rocosa sobre la que se cimenta la ciudadela y, por ende, «salvaguardar el conjunto histórico y artístico de Peñíscola».

CONSECUENCIA DEL TEMPORAL // El fuerte temporal marítimo que azotó la costa durante la primera semana del mes de diciembre causó, en la madrugada del día 6, la caída al mar de dos bloques de grandes dimensiones.

El Ayuntamiento informó de inmediato de los desprendimientos al servicio provincial de Costas y solicitó que los técnicos realizaran una primera valoración de lo sucedido con urgencia.

Tres días después, el lunes 10, un ingeniero del ente inspeccionó la zona rocosa afectada junto al alcalde, Andrés Martínez, y el edil de Servicios, Jorge Rovira, quien aseguró que la caída fue debida al proceso natural de descalcificación de la roca y que no veían peligro para la seguridad de la estructura del tómbolo.

No obstante, la moción aprobada considera «conveniente y necesario» que el Ejecutivo elabore cuanto antes un estudio pormenorizado que concrete el estado de desgaste del acantilado y las causas de los desprendimientos.

En la misma sesión dieron luz verde a la petición unánime al Consell para mejorar la gestión del Palau de Congressos.