El anuncio por parte de la Policía Local de Burriana de intensificar las labores de control con drones y patrullas camufladas para el cumplimiento de las medidas sanitarias en prevención del covid-19 y la supervisión de zonas sensibles de reunión de jóvenes con la vigilancia de dron han provocado un efecto disuasorio en lo concerniente a la celebración de botellones. La primera noche del operativo especial puesto en marcha por las autoridades locales se saldó ayer sin ningún tipo de incidentes relacionados con el consumo de alcohol en la vía pública o a supuestas infracciones como la ausencia de mascarilla obligatoria o incumplimiento de la distancia social.

Así lo destacó el jefe de la Policía Local de Burriana, Francisco Javier Catalán, reseñando que la labor informativa llevada a cabo en las redes sociales y en los medios de comunicación sobre la activación del dispositivo de prevención ha surtido efecto. Catalán informó que «ha sido una noche muy tranquila en lo referido a las medidas de prevención del virus y no se detectaron concentraciones importantes de jóvenes por la calle». Añadió, por otra parte, que sí llegaron a observar la reunión de pequeños grupos de 3 o 4 personas pero que en el transcurso de la noche no llegó a interponerse ningún boletín de denuncia.

La difusión de unas imágenes en la que se apreciaba la celebración de un macrobotellón en la playa de l’Arenal corrieron como la pólvora. En el vídeo podían verse a decenas de jóvenes de fiesta, bebiendo alcohol y sin llevar mascarilla ni guardando la distancia de seguridad. De hecho, la alcaldesa, Maria Josep Safont, hizo manifiesta su «indignación» ante esta conducta irresponsable por el riesgo de contagio que comporta este tipo de situaciones.

El jefe de la Policía explicó que durante la noche del viernes se hizo especial hincapié en la vigilancia de la zona marítima donde transcurrieron estos hechos, pero no se registró ningún tipo de actividad en esta área muy concurrida por los jóvenes.

Este operativo también está orientado a intensificar las inspecciones en los establecimientos de hostelería y restauración y en espacios públicos para velar por hacer cumplir el distanciamiento y el horario de cierre. Cabe recordar, que el fin de semana pasado las autoridades denunciaron a un establecimiento por incumplir la normativa vigente anticovid. La intervención se saldó con tres infracciones, catalogadas de graves y muy graves.

El nuevo escenario de medidas restrictivas tras la publicación de la resolución por parte del Consell no altera el transcurso de este dispositivo especial para el que las autoridades locales quieren comenzar con la labor pedagógica e informativa sobre las medidas adoptadas. Se continuarán reforzando los medios personales y materiales, como el dron y la utilización de un coche camuflado, para garantizar el cumplimiento de las restricciones a la movilidad implementadas por parte de la Generalitat Valenciana.

La entrada en vigor del llamado toque de queda prohíbe la circulación de personas en vías y espacios públicos entre las 00.00 y las 06.00 horas, se limitan las reuniones de carácter social a seis personas y se decreta el cierre de parques y jardines antes de las 22.00 horas entre otras normas.