Los amantes de la naturaleza, los excursionistas o los caminantes en general tienen, desde ayer, un nuevo aliciente entre los montes de Gaibiel: una ecobiblioteca. La Asociación Cultural Bosquecillo de esta localidad, con motivo de los actos desarrollados por la celebración del Día del libro, ha propuesto un proyecto que ha hecho mucha ilusión a sus promotores: la creación de una pequeña ecobiblioteca o biblioteca abierta, un espacio donde libremente se puedan coger, dejar o intercambiar libros de todo tipo.

Para ello, los impulsores pensaron en ubicarla en un lugar evocador, con unas vistas fantásticas, en Santa Bárbara. Más concretamente, en un rincón de la caseta de cazadores que hay junto a la balsa. Un enclave cercano a la población, “como a un kilómetro, ascendiendo, donde confluyen varias rutas”, ha precisado Yolanda Lidón, integrante de la entidad.

Los miembros del Bosquecillo han activado la acción con libros que han donado y colocado en unas estanterías instaladas en la caseta “pero lo que pretendemos es que pase a ser un proyecto abierto y que cualquier persona que lo desee suba hasta allí, curiosee los ejemplares que le puedan interesar, los hojee sentado en unas rocas mientras observa la puesta de sol o el amanecer, si le gusta, que se lo lleve para leerlo en su casa, y que deje otro a cambio. Por supuesto, también se puede ampliar con otras donaciones”, han señalado desde la organización.

Experiencia inspirada en otra de Pavías

Los creadores de esta propuesta se han inspirado en una similar en el camino de Gaibiel a Pavías, ideada por la Asociación Cultural Artea de este segundo municipio, en el conocido como Refugio Cueva Santa, desde donde también se divisan unas vistas magníficas, con el castillo de Gaibiel muy pequeño, al fondo.

Bosquecillo ha agradecido especialmente la amabilidad de la Sociedad de Cazadores por permitirles, sin reparo, hacer uso de su caseta. “Confiamos que todos, incluida la población más joven que en ocasiones sube allí de fiesta, sabremos respetar este rincón de paz y cultura. Nada nos gustaría más que ver el entorno de Santa Bárbara convertido en una gran sala de lectura al aire libre, además del lugar de disfrute personal por la belleza que le rodea que siempre ha sido”, indicaron desde el colectivo de Gaibiel.