Después de conocer el origen toponímico de las comarcas de Castellón en general y de la de l’Alcalatén en particular, hoy toca hablar del territorio de l’Alt Maestrat. Es bien sabido que la palabra «maestrazgo» hace referencia a «maestro» (como patronazgo a patrono o liderazgo a líder), pero no se trata de un maestro de escuela, sino del gran maestre de los templarios, a cuya jurisdicción pertenecían estas tierras. 

Una vez desaparecida la orden del Temple, las tierras pasaron ser de las órdenes de Montesa y San Juan. La característica de «alto» se refiere a su lejanía del mar y, obviamente, está para distinguirlo del Baix Maestrat, más cerca de la costa. Veamos los nombres de las poblaciones ordenados según conozcamos mejor o peor su origen.

Vilar de Canes

El pueblo de Vilar de Canes viene, evidentemente, del término latino Vila, que significa «conjunto de casas» o «pueblo», y que aún hoy sirve para denominar las villas veraniegas. Y de villa vendría villar como de olivas olivar o de colmena colmenar: esta terminación denota un conjunto de cosas. Canes, por su parte, viene del latín canna, «caña». Así que Vilar de Canes es «el pueblo de las cañas o cañaverales». 

La Torre d'en Besora

La Torre d’en Besora oculta un poco más su origen. Aunque en el siglo XI se la conocía por la torre de Vinrabí, luego fue gobernada por Ramón de Besora. Y de ahí el nombre de la Torre d’en Besora. El «en» era el tratamiento de cortesía valenciano para los caballeros (el rey en Jaume), como «na» lo era para las damas (por ejemplo, Na Violant d’Hongria). Besora sería el lugar de procedencia del tal Ramón, y parece que está por Osona (Cataluña), donde todavía hay poblaciones como Sant Quirze de Besora o Santa María de Besora.

Albocàsser

Albocàsser procede seguramente de un tal Abu Alcasir, que es un nombre propio. Sin embargo, también los nombres propios tienen significado: Abu es «padre de» y casir podría venir de al-qasr, la «fortaleza»; de donde viene Alcàsser o la palabra alcázar (Abu también indica meramente posesión, así que podría traducirse como «el del castillo»).

Ares

Menos seguros son los siguientes. Por ejemplo, Ares del Maestre podría tener un origen prerromano y significar «valle» (ares, arán…). Pero más seguramente no proviene del íbero, sino del latín: ara, altar. Era habitual en tiempos de los romanos situar altares en los puertos de montaña y, aunque en Ares no han quedado restos de dicho altar a divinidades paganas, ha quedado el nombre.

Benassal

Tampoco es muy claro el nombre de Benassal. Alguna etimología popular lo hace provenir del nombre valenciano fenassal, lugar donde crece el fenàs, que es el fenazo o lastón. Pero parece más sensata la opinión que lo hace provenir del árabe: ben («hijo de») el melero. 

Catí

Tampoco es muy seguro el origen del nombre de Catí, que parece provenir del latín catinu («plato, hondonada, hoyo») y que tendría que ver con la geografía propia del pueblo, porque ciertamente está en una parte baja. 

Culla

Culla, por su parte, lo hacen provenir de collia, que sería «cuello» (de montaña, claro); otros opinan que viene del íbero Colla («cerro») y quizá más seguro sea el origen árabe: Qulla («monte»). De esta manera, Catí se encuentra en una hondonada y Culla en el monte, que es lo que dicen precisamente los nombres. 

Tírig

De Tírig no se sabe nada con certeza: no parece ser de origen árabe ni latino, luego seguramente tendrá un origen prerromano. Comparando el nombre con algunos étimos de otras poblaciones vendría a significar «alto del río». El problema está en que ni la población está a ninguna altura considerable, ni tiene río conocido salvo algunos barrancos. Pero así de incierto es el mundo de la etimología en ocasiones.