En el año 1943, mientras cavaba la zanja para colocar las bases de los cadafals en la plaza del pueblo, un vecino se topó de casualidad con una estatuilla de bronce en la que aparecía representado Hércules. Consciente de que ese hallazgo podía tener cierta importancia, avisó a un conocido, el entonces secretario-interventor del Ayuntamiento, para que decidiera qué hacer con esa pequeña figura de unos 20 centímetros.
Ahora, 78 años después, la Jana recupera esta escultura gracias a la firma de un contrato con José Simó Guasch, el hijo del funcionario municipal de aquella época, mediante el que la familia cede por 30 años --prorrogables-- al consistorio esta estatuilla.
«Durante todo este tiempo la guardó en su casa. Y menos mal que lo hizo. Tuvo buen criterio, porque de haberla dado en ese momento al Ayuntamiento, seguro que hoy en día ya no estaría y habría desaparecido», explica el alcalde, Domingo Tolós.
Antiguo asentamiento romano
Aunque fuera descubierta en 1943, su origen es mucho más lejano. Basándose en los informes que analizaron esta obra en la década de los ochenta, el primer edil detalla que tiene «2.000 años de antigüedad». Su historia se remonta a la época del Imperio Romano, en la que había un asentamiento en lo que ahora es la Jana. «La estatuilla sería creación de una familia o una comunidad, y sobre la plaza en la que se encontró habría un oratorio o un altar particular», detalla Tolós, y apunta a que los romanos utilizaban esta escultura como forma para venerar a sus dioses.
Seguirá en el Museu de Belles Arts
Este Hércules de bronce está actualmente en el Museu de Belles Arts, en Castelló, para que los técnicos de la Diputación evalúen su estado de conservación y lo restauren (tal como se aprecia en la imagen, está decapitado y tiene el brazo roto). La intención del Ayuntamiento es que la figura siga allí, ya que «un museo es el lugar idóneo para preservarla y no se eche a perder» y solo la pedirán para «exposiciones puntuales».
Ante el valor económico que podría tener la escultura en una posible venta, el alcalde agradece a la familia que ha cedido el Hércules su gesto de «anteponer los intereses de la comunidad y del pueblo de la Jana a los particulares».
