Más de 10 años después se acerca el final de la fallida torre eléctrica de la calle Argila. Iberdrola ha solicitado al Ayuntamiento de Burriana el permiso de obras para acometer el desvío de la línea para, por fin, sacarlo del medio de la calzada y terminar con la anómala situación.
La fallida ubicación del poste, localizado cerca del polígono de Nules y con muchas empresas asentadas, es un impedimento para que los vehículos que usan cada día la calle circulen con total seguridad.
Fuentes técnicas municipales han confirmado a Mediterráneo que la empresa eléctrica ha pedido la autorización para realizar la reforma de la línea aérea trifásica y que proponen retirar dicho apoyo hacia la acera. Faltan por confirmar otros detalles como el inicio o la duración de los trabajos.
"No sabemos si ha sido a efecto de las peticiones del Ayuntamiento o porque forma parte de algún plan más general de mantenimiento, pero el resultado será beneficioso"
No obstante, la duración de este tipo de licencias es de tres meses, por lo que su comienzo tendrá lugar antes de ese plazo. Según explicaron, a lo largo de los próximos días tendrán más detalles.
Pese a que, de momento, el consistorio desconoce los motivos por los que la mercantil ha declinado realizar hasta ahora el proyecto, el concejal de Urbanismo, Bruno Arnandis, valoró la noticia de forma positiva. Explicó que «no sabemos si ha sido a efecto de las peticiones del Ayuntamiento o porque forma parte de algún plan más general de mantenimiento», pero sea cual sea el pretexto, «el resultado será beneficioso».
'Burriana, París y Londres'
La problemática se remonta al año 2011, momento en que la empresa Urbasur Siglo XXI no acabó las obras de urbanización de la Unidad de Ejecución D3.3 con el 20% de las tareas sin finalizar. Una de las cuestiones que se quedó sin resolver fue, precisamente, la retirada del poste, que se quedó como signo de la crisis económica de aquellos años. De hecho, llegó a circular entre los vecinos un meme con el famoso lema de Burriana, París y Londres, cambiando el emblema del campanario por la malograda torre.
"La resolución de esta unidad ha sido un problema enquistado con el tiempo y la torre eléctrica era sólo la punta del iceberg"
Dejando de lado la anécdota humorística, lo cierto es que durante todo este tiempo han sido diversos los coches que han tenido algún percance debido al defectuoso trazado. De hecho, en el último tiempo se reforzó la señalización con pintura más llamativa y la instalación de unas pilonas de plástico para alertar a los conductores.
Arnandis remarcó que «lamentablemente, la resolución de esta unidad ha sido un problema enquistado con el tiempo y la torre eléctrica era sólo la punta del iceberg». Arguyó que en diversas ocasiones han intentado poner fin a lo poco que queda por resolver de la urbanización, «pero, como hay una resolución judicial pendiente, tenemos que esperar la autorización para acabar». Falta también algunos bordillos y varias conexiones de agua.
