Peñíscola dice no de forma unánime a la tasa turística. El pleno aprobó sin votos en contra la moción impulsada por el equipo de gobierno (PP) para reclamar a la Generalitat que no aplique este impuesto.
Lo más llamativo de que esta propuesta haya salido adelante sin rechazo es que implica que Compromís, uno de los partidos con representación municipal, no se opuso a su aprobación y secundó su ratificación.
Un visto bueno que contrasta con la postura mostró el mismo grupo parlamentario en la Diputación el pasado martes, cuyos representantes se quedaron solos en la sesión plenaria de la institución provincial al mostrarse entonces a favor de la implantación de esta tasa.
El documento aprobado en el pleno de Peñíscola insta al Consell a no poner en marcha este gravamen en la Comunitat «por sus efectos desfavorables para el turismo y por la férrea oposición a la misma del sector». El texto también exige a la Generalitat a «consensuar» con el gremio «todas las medidas que en ese ámbito sean adoptadas en el futuro».
Llega "en el peor momento posible"
El Ayuntamiento muestra así su «rechazo» a la implantación de la tasa turística, tal y como recalca la concejala del área, Raquel París, quien insiste en que este impuesto es «inoportuno» y «daña al sector». «Celebro que todos los grupos políticos hayan apoyado nuestra propuesta de no aplicarla, la Generalitat debe escuchar a los municipios turísticos y al sector», reivindica la edila de Turismo.
Por su parte, el alcalde, Andrés Martínez, insiste en que esta medida se impulsa desde el gobierno autonómico «en el peor momento posible, cuando debemos contribuir a la recuperación de la actividad turística y no tratar de perjudicarla con tasas que dañan su competitividad y la imagen de nuestros destinos», lamenta el primer edil de la Ciudad en el Mar.
