El Ayuntamiento de Moncofa ha presentado una decena de alegaciones al proyecto de Costas que conllevará el desmantelamiento de la avenida Mare Nostrum, al sur de la Gola de Masbó. El plan que defiende el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico «invade, destruye y ocupa en torno al 50 % de la superficie de este vial, pero no con ello amplía el espacio actual destinado a uso peatonal, ya que reduce el ancho total de la misma y es incluso menor en algunas zonas», asegura el alcalde, Wences Alós.
Asimismo, desde el consistorio hacen hincapié en que programa presentado por el Gobierno no contempla ninguna de las actuaciones propuestas en la Estrategia de Defensa del litoral y se enmarca como una actuación complementaria a los espigones. Es por ello que Alós reivindica que «se acometan en primer término los espigones y, posteriormente y tras un análisis detallado de los resultados, las secundarias o complementarias, y no a la inversa».
En el documento de alegaciones elaborado por Moncofa se advierte de que la realización de un cordón dunar «producirá una obstrucción visual en todo el paseo modificando la imagen y el paisaje de forma patente, pasando de disponer de un corredor con el mar mediterráneo como telón, a visualizar un muro de hormigón y una duna artificial sobre este». Y alertan de que se producirá una variación climática en la zona «al imponer una barrera a la brisa marina, que derivará en sensibles incrementos de temperatura».
Efectos adversos
Las alegaciones también plantean, entre otras cuestiones, que parte de la actuación se realiza fuera de la zona de Dominio Público Marítimo Terrestre estatal, los efectos adversos sobre el tráfico rodado, el transporte público, la supresión de plazas de aparcamiento o los accesos de los servicios de emergencia.
Al respecto, Alós reitera que «la solución es la construcción de espigones, al igual que se ha hecho en Almenara y se va a hacer por este Gobierno en Camí Cabres, solución que plantea la estrategia aprobada y no iniciar obras complementarias antes de empezar la principal, porque la casa no se empieza nunca por el tejado».
Con todo, desde el consistorio hacen hincapié en que la Estrategia de Defensa del Litoral «no contempla en ningún caso modificar la línea de playa tierra adentro, ni tampoco la anchura y configuración de una arteria principal vertebradora de Moncofa, como es la avenida Mare Nostrum».
En concreto y como alguno de los efectos «negativos» para Moncofa que se derivan de la propuesta efectuada por el Ministerio de Transición Ecológica destaca la supresión de 2.000 m² de espacio para aparcamiento, al convertirse la avenida Mare Nostrum en un paseo marítimo al que solo se permitirá la entrada de los vehículos de los residentes. Y la eliminación del tráfico rodado obligará a modificar las direcciones de los viales del entorno, con el fin de garantizar accesos de seguridad.
