De Nueva Zelanda, Japón y EEUU a vivir rodeados de montañas en un paraíso del teletrabajo en Castellón: "El contraste es brutal"

A solo 15 minutos en coche de uno de los pueblos declarados como Más BonitosEspaña, entre los términos municipales de Culla y la Torre d’en Besora, se encuentra «una pequeña joya escondida entre las montañas de Castellón, perfecta para cualquiera que busque paz en un entorno de convivencia y trabajar de forma remota al mismo tiempo». «Trabajar desde el paraíso». Son las descripciones que realizan en plataformas especializadas dos de las decenas de colivers y coworkers que han pasado por Ruralco, donde el trabajo y la convivencia se unen, rodeado de personas de todo el mundo.

Literalmente. Argentina, Inglaterra, EEUU, Nepal, India, Nueva Zelanda, Brasil, Italia, Francia, Alemania, Lituania, Israel, Holanda, Dinamarca, Perú, Japón, Alaska y otros puntos de España son algunos de los lugares de procedencia de los numerosos profesionales que ya han pasado por este coworking y coliving rural, uno de los pocos existentes en España y el único de la provincia de Castellón.

«El contraste para muchos de ellos es brutal; pasan de ciudades con millones de personas a estar en plena naturaleza, donde el pueblo más cercano tiene menos de 500 habitantes», apunta el anfitrión, Óscar Traver.

Cuando este vecino de Culla se embarcó, junto a dos amigos de les Useres y Atzeneta en este proyecto --que abrió sus puertas en 2020-- no sabía lo que les depararía el futuro.

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Los colivings son una evolución del coworking (término utilizado para denominar espacios de trabajo compartidos por diferentes profesionales). Son entornos de convivencia creados para generar vínculos profesionales y nuevas amistades.

Dinamización de la zona

Pero estos castellonenses querían dar un paso más y enfocarlo al turismo rural, con experiencias para quienes se alojaran allí, con la finalidad de dinamizar la zona. Un emprendimiento implicado en el territorio. "El coliving rural es mucho más que compartir un espacio. Es un estilo de vida donde convivir e interactuar se convierten en la base de una experiencia enriquecedora".

Para ello, firmaron un convenio con el Ayuntamiento de Culla, que les cedió el viejo albergue Molí Toni --que estaba en desuso-- con la finalidad de rehabilitarlo y emprender la actividad. Las ayudas Leader que solicitaron, con el asesoramiento del GAL Altmaesports, fueron de gran ayuda en ese momento.

Cuatro años después y tras una pandemia por medio, el crecimiento ha sido exponencial y el resultado del 2023 y lo que llevamos de 2024 es de lo más satisfactorio. Dos de esos amigos tomaron otros caminos y Traver sigue al frente de esta iniciativa. 

Perfil

Programadores, diseñadores, creadores de contenidos, escritores, profesores de idiomas on line... Son nómadas digitales, empresarios y freelances con edades entre los 20 y 50 años, que pueden alojarse desde varias semanas hasta unos 3 meses, de modo que se crean sinergias entre ellos. Disponen de instalaciones amplias y luminosas, con internet de alta velocidad, y espacios al aire libre para trabajar a su ritmo. «Si buscas paz e inspiración, es tu sitio».

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Tiempo de ocio

Con capacidad para 14 personas en habitaciones propias con aseos individuales, esta casa rural es sostenible y dispone de ascensor, gimnasio, sala de cine, plataformas de streaming, huerto y cocina industrial. «La comida es muy internacional, pues se organizan y cocinan para todos», apunta.

En una pizarra anotan las actividades de ocio de la semana: excursiones guiadas, deporte, juegos, catas de vinos y quesos con productos de la comarca, senderismo, yoga, recogida de aceitunas, almendras... La monotonía no existe. 

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