La Generalitat destina este año un total de 67,7 millones de euros al Plan de Prevención y Extinción de Incendios Forestales, que contará con 8.600 trabajadores para las labores de vigilancia y extinción de fuego en los montes. Los consellers de Medio Ambiente, Fernando Modrego, y Justicia y Administraciones Públicas, Carlos González Cepeda, presentaron ayer el plan y destacaron que en los últimos años se ha registrado un importante descenso de la superficie quemada.

Según los datos que aportaron, la media anual de hectáreas quemadas ha pasado de 34.060,99 (entre 1987 y 1994) a 3.087,79 (de 1995 al 2002), lo que representa una reducción superior al 90%.

El programa amplía las rutas de vigilancia aérea desde Semana Santa y mantiene en los medios el sistema Aerocom, que permite la transmisión de imágenes de vídeo en directo hasta el centro de coordinación de emergencias, y la tecnología GPS en los vehículos de emergencia para su localización vía satélite.

La Generalitat, con el fin de mejorar la operatividad del programa contra incendios, ha aumentado el número de unidades de prevención, que este año ascienden a 104 --nueve más que el pasado año--. Entre ellas destaca la nueva unidad técnica, que nace con la voluntad de convertirse en oficina móvil de apoyo a la labor del plan en toda la Comunidad Valenciana.