El ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, presentó ayer al Consejo de la UE un memorando en favor del reconocimiento como "lenguas oficiales y de trabajo" en la Unión del euskera, el gallego y la lengua que "se denomina catalán en la Comunidad Autónoma de Cataluña y en la de las Illes Balears y que se denomina valenciano en la Comunidad Valenciana".
En rueda de prensa, Moratinos aseguró que la petición española constituye "el máximo reconocimiento" posible a estas lenguas, subrayó que con la demanda "se cumple una promesa de este Gobierno", y afirmó que la petición fue recogida "con respeto e interés por parte de todos los estados miembros".
Por su parte, la Generalitat Valenciana recurrirá ante el Tribunal Supremo el memorando para el reconocimiento en la UE de las lenguas cooficiales de España porque "no satisface íntegramente el interés de los valencianos", según informó la consellera de Cooperación y Participación, Gema Amor. Amor, de visita en Bruselas coincidiendo con la presentación del memorando ante el Consejo de la UE, indicó que el recurso, en el que en estos momentos trabaja el Gobierno valenciano, será presentado "de forma inmediata, en cuanto esté preparado".
MALESTAR DE CAMPS Por su parte, el presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps, dijo ayer que la defensa del valenciano "no es una cuestión filológica, sino de historia, sentimiento, tradición y de ley", y pidió al Gobierno que "aplique la ley" y reconozca esta lengua que está recogida en el Estatuto de Autonomía. Camps reiteró que el Gobierno tiene que "aplicar la ley, que dice que las lenguas cooficiales son las que recogen los estatutos de autonomía", y añadió que "defenderé el nombre de la lengua hasta las últimas consecuencias", dijo Camps en el Foro ABC.
Indicó que "por razón de sentimiento los valencianos siempre hemos llamado valenciano a nuestra lengua", matizó que la Constitución Española dice que "la señas de identidad hay que protegerlas", y agregó que su partido defenderá el texto constitucional y el Estatuto.
El presidente aseguró que seguirán defendiendo el valenciano ya que, de lo contrario, "me parecería que estaría permitiendo una ilegalidad inconstitucional y antiestatutaria, y rompiendo parte del patrimonio común de los españolas, que es el valenciano, por sentimiento y tradición".
NUESTRA RIQUEZA Camps dijo que el valenciano "busca la suma y no la diferencia", destacó que esta lengua "forma parte de nuestra riqueza, nuestra cultura, patrimonio y nuestro ser". "Somos valencianos y españoles y hablamos en valenciano. No nos queremos diferenciar de nadie", apostilló.
