El presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón, ha despejado su camino hacia la presidencia del PP valenciano, una carrera en la que se le ha cruzado un corredor sorpresa (el alcalde de Ayora, José Vicente Anaya) que, si bien nunca fue una preocupación real, le ha alterado unas primarias diseñadas por Génova para el cierre de filas. La aventura para Anaya ha acabado esta noche tras el recuento oficial de la votación celebrada a lo largo de la jornada en las sedes de la Comunitat Valenciana. Y ha acabado mal. Muy mal. Un escrutinio que entierra sus aspiraciones de presidir el partido y convierte a Mazón, en candidato único, ahora sí, para salir en hombros en el Congreso Regional previsto para el día 3 de julio. Al final de un censo de 7.580 militantes inscritos, han votado 6.990, de los cuales el aspirante oficial se lleva 6.679, es decir, el 95%, mientras que el aspirante alternativo se ha quedado en 283 votos, el 4%.

El resultado supone una victoria aplastante para el dirigente alicantino que, sin pretenderlo, se ha visto abocado a una votación que ofrece una de cal y otra de arena. La parte negativa es que el proceso ha sacado a relucir la existencia de un censo hinchado del PP, congelado en el tiempo, en torno a los 134.000 afiliados. También el escaso entusiasmo que la renovación del PP ha despertado entre la militancia que un día se levantó con Isabel Bonig como presidenta y al otro, con su renuncia forzada a favor del candidato elegido por la dirección nacional.

Mazón hizo su primera demostración de fuerza al reunir 12.000 avales hace dos semanas, pero al final sólo ha logrado algo más de la mitad de los votos, prácticamente un apoyo similar al que consiguió Bonig en sus primarias de 2016 (6.824 papeletas) en una competición contra nadie ya que el rival de entonces (José Luis Bayo)se retiró antes de la votación. Mazón, sin embargo, siempre podrá decir, como lo hacía Bonig, que su candidatura, que tiene el estigma de ser la bendecida por Génova, ha logrado la legitimación de las bases, aunque estas apenas representen el 2,2% del censo oficial.

Fracaso que salpica al expresidente Camps

Eso sí, este proceso no sale gratis a nadie. A Ayora le costará su futuro en el partido (no ha sido posible la integración de candidaturas y se convierte en persona non grata en el futuro PPCV), pero indirectamente también sale tocado el expresidente Francisco Camps y sus colaboradores, quienes en la sombra han alentado a Anaya y tratado de usar su candidatura para tratar de hacerse fuertes en el cap i casal, donde Camps aspira a ser alcaldable. El recuento en València, según los datos facilitados, evidencian el fracaso de la candidatura de Anaya y, por ende, de los seguidores de Camps. De los 429 votos, solo 33 han ido para Anaya, el 7,7% del censo. Es decir, el 92% de los sufragios son apoyos a Mazón. Una victoria que también refuerza a Maria José Català, futura secretaria general del PPCV y aspirante a la alcaldía.

Anaya insinúa un pucherazo

Tampoco estas primarias benefician la imagen de un partido, poco ejercitado en fórmulas de democracia interna y dónde mantener la neutralidad ha sido complicado. Desde el minuto uno, Anaya ha ido denunciando presiones por parte del aparato del partido e incluso en la jornada electoral ha denunciado el veto a sus interventores. El Comité Organizador del Congreso (COC) ha admitido una "confusión" que en la práctica ha impedido a los supervisores del alcalde de Ayora que vigilaran el proceso de votación en Valencia ciudad por la mañana. De hecho, el rival derrotado ha puesto en cuestión el resultado en la ciudad, al asegurar que sólo de su equipo y familia más de 70 personas han votado en València y que en algunos municipios de Alicante no había papeletas de su candidatura.

MAYORÍA APLASTANTE TAMBIÉN ENTRE EL PP DE CASTELLÓN

El respaldo masivo a Carlos Mazón también ha sido claro entre los afiliados del PP en Castellón. 993 votos a favor del presidente de la Diputación de Alicante, nueve para Anaya y 12 en blanco es el resultado de la consulta en la provincia, en la línea del balance en la capital de la Plana, donde Mazón suma 203 respaldos frente a únicamente tres de su compañero de formación. Un dato que no hace más que reflejar la lógica, pues el alicantino se ha visto respaldo por toda la cúpula popular castellonense en las últimas visitas que ha realizado a la provincia en las últimas semanas.