El Ministerio de Sanidad considera que las terrazas de los bares y restaurantes que tienen al menos tres paramentos y techo deben considerarse también como interiores de los establecimientos, que plantea cerrar si, entre otros indicadores, la incidencia acumulada alcanza los 150 casos de coronavirus por 100.000 habitantes. Además, propone clausurar los establecimientos de hostelería cuando se llegue al nivel cuatro de alerta máxima. Así, se recoge en el documento de Actuaciones de respuesta coordinada para el control de la transmisión del covid-19, que debatió ayer la Comisión de Salud Pública.
El objetivo es unificar restricciones en todas las comunidades de acuerdo a los niveles de alerta sanitaria decretados teniendo en cuenta factores, como la incidencia acumulada, la tasa de contagio o la presión hospitalaria. Esta ha sido durante semanas una de las principales reivindicaciones del sector hostelero de la provincia para evitar «decisiones imprevistas» por parte del Consell que les dejaba sin poder abrir los interiores de sus establecimientos, mientras en otras zonas de España con peor evolución epidemiológica había más flexibilidad en los bares y restaurantes.
Opinión del sector
«Nos parece importante unificar los criterios y evitar incoherencias. Esperemos que esa armonización no vaya acompañada de nuevas restricciones», señaló ayer el vicepresidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería y Turismo de Castellón (Ashotur), Luis Martí.
Por su parte, el portavoz de la Asociación de Hosteleros de Castellón (Ashocas), Juan Carlos Vidal, resaltó que son partidarios de esta medida para evitar lo que ellos consideraron semanas atrás cierres «arbitrarios». «Era algo que veníamos exigiendo para no ir improvisando», resaltó, al tiempo que indicó que será necesario conocer al detalle el documento para hacer más valoraciones.
Documento a debate
Se trata de un documento sobre el que aún tiene que trabajar la comisión, donde ayer las comunidades siguieron realizando aportaciones, y posteriormente tiene que tener la luz verde del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud con lo que está sujeto a cambios y no se aplicaría antes de Semana Santa. Se trata de una actualización del aprobado el pasado mes de octubre, aún vigente.
