Son duros, comprometidos y reivindicativos. Miguel Ángel Titos a la batería, Alberto Sales a la guitarra y Fran Martínez de Osaba a la voz, bajo y gaita son Templario, uno de los grupos más veteranos del heavy metal nacional que mañana actúan en la sala Doctor Slump, presentando su nuevo disco, La risa de las bestias, teloneados por los jóvenes Wallace. "Hay que dar una oportunidad a los nuevos valores", señala el cantante.

Llevan en el mundo de la música desde 1988. Y ya son 15 años con un "heavy metal, con tres discos en el mercado y una larga lista de fans en toda España. De hecho, la actuación de los castellonenses en la sala del polígono Castalia forma parte de una gira que les llevará a Girona, Valencia, Alicante, A Coruña, Vigo, La Vall (23 de mayo) y Benassal (20 de junio). Su compromiso arranca de las letras, "agresivas y reivindicativas con bases contundentes y riffs, explican. "La música --dice Martínez de Osaba-- tiene que ser reivindicativa, comprometida, porque es uno de los pocos vehículos que llega directamente a la gente. Siempre hay algo por lo que protestar, siempre hay cosas que arreglar, y nosotros lo hacemos a través de nuestra música".

"El heavy, asegura.

Una de las canciones de La risa de las bestias, Cruces de mármol 1936-1939, hace clara referencia a la guerra. "Trata de la contienda civil española, pero en el fondo, habla de esa y de cualquier guerra. No se aprende, detrás de una guerra llega otra y otra...", dice. Para el disco han contado con las colaboraciones del violinista Jorge Sangorín, la soprano Emilia Vera y el flautista del veterano grupo Ñu, José Carlos Molina. Con ellos, la comunicación con el público es directa, contundente.