«Contador está espléndido». Quien habla es Dani Navarro, su mejor escudero en la montaña, el que le apoyó en el Giro y el que volverá a ser el perfecto reflejo del tricampeón de la ronda francesa en las cumbres del Tour. «Contador está animado», es lo que se repite en el entorno del corredor. La Agencia Mundial Antidopaje (aunque con muchos matices) comienza a hablar de la vía de contaminación alimentaria en «ciertos casos» de presunto dopaje con clembuterol, la UCI (Unión Ciclista Internacional) pide respeto para el pinteño, quien, a su vez, constata en los Alpes franceses que los músculos de las piernas ya han olvidado el esfuerzo por la maglia rosa. Una prueba del buen ánimo de Contador. El viernes tenía previsto volar desde Lyón a Madrid, una vez finalizado el entrenamiento alpino. Decidió buscar un vuelo que lo dejara en Toulouse porque quería ver, aunque fuera en coche, cómo era la ascensión a Luz Ardiden (meta de la 12ª etapa del Tour 2011), la única cima pirenaica que no conocía. Por ahora, no se siente perseguido en Francia. El Tour comienza en menos de dos semanas (2 de julio). Solo el llamado núcleo duro del ciclismo francés, encabezado por el mánager del equipo Europcar, Jean-René Bernaudeau, ha protestado por la presencia de Contador en el Tour al considerar que un ciclista pendiente del fallo del TAS (Tribunal de Arbitraje Deportivo, que examinará su caso del 1 al 3 de agosto) no debía ir a la grande boucle. Tales declaraciones llevaron a la UCI a emitir el jueves pasado un comunicado de apoyo a Contador, posiblemente solicitado por la dirección de la carrera. El miércoles, una pareja de gendarmes que hacía guardia en un túnel sin iluminar, donde habían sido atropellados varios cicloturistas, obligó a Contador y a sus cinco gregarios del Saxo Bank a subirse a los coches auxiliares. «Les dijeron que tenían que cargar las bicis en las bacas o comprar unas lucecitas en una tienda que había a la entrada del túnel». Por la noche, el máximo responsable policial del departamento de Isère llamó al hotel del equipo para presentar excusas. «Dijo que los gendarmes se habían excedido». De ahí que Contador entienda que en Francia no hay maniobras en su contra. El día antes se produjo la primera reacción oficial de un alto dirigente de la AMA hablando de la posibilidad de que algunas trazas de clembuterol en pequeñas cantidades halladas en la orina de deportistas se deban a una intoxicación por carne contaminada. El mes pasado cinco futbolistas de la selección de fútbol mexicana presentaron niveles de clembuterol. «Por debajo de ciertas cantidades habría que considerar el contexto del deportista, basándose en sus resultados previos y posteriores a la detección», explicó Olivier Rabin, director científico de la AMA. Los laboratorios solo tienen la obligación de detectar a partir de 2.000 picogramos (1.500 más de los descubiertos a Contador), de ahí que se lleve casi un año hablando de la cuestión. Contador prefiere hacerlo en la carretera.