Casuco dio la cara en el adiós tan triste a la temporada del Castellón, futbolísticamente hablando. El responsable del área deportiva ha quedado descolocado a raíz del anuncio de Jiménez de ir al concurso de acreedores, lo que compromete las opciones de comprar plaza en 2ª B directamente a un club.

A este respecto, Casuco admitió que desconoce si es verdad que el consejero delegado ha adquirido ya esa plaza, como éste aseguró el viernes. “Sé que ha tenido reuniones con varios equipos que estaban por la labor de vender”, introdujo. “He hablado con él y, por lo que me ha dicho, no hay nada descartado en este sentido y que seguirá insistiendo en comprarla”, explicó.

En lo personal, el técnico fue muy cauto respecto a si se plantea marcharse. “Tengo dos años de contrato. Si el proyecto deportivo sigue adelante y el club es financieramente viable, seguiré al frente”, comentó, al tiempo que recordó que él es “uno de los acreedores” del Castellón, que aún le adeuda dinero de la pasada campaña.

Casuco admitió que la incertidumbre trastoca sus planes. “La obligación de los jugadores es denunciar los impagos”, añadió antes de descubrir que la plantilla, incluso, ha reclamado también, por adelantado, la de mayo, por las nulas esperanzas de que Jiménez la abone.

Cuestionado por el viraje de imprevisibles consecuencias a cargo del abogado y empresario valenciano, el llamado a ser próximo entrenador admitió no tener respuesta. “Se que hay intención de pagar, pero no sé cuándo”, admitió Casuco. H