Ha cambiado la filosofía y los valores de la selección italiana, que ha dejado atrás su planteamiento rácano para acercarse a un estilo ofensivo marcado por su ambición y su personalidad. Cesare Prandelli ha llevado a Italia hasta la final de la Eurocopa. Mañana se medirá con España, uno de sus modelos futbolísticos. “Es la referencia de todos en muchos aspectos, pero nosotros hemos crecido en los últimos tiempos. Hemos cambiado mucho desde el estreno”, afirmó ayer el técnico, que prefiere ceder la presión a la campeona del mundo. “España es clara favorita”.

En un contexto complicado marcado por el escándalo de las apuestas y el pesimismo del país, Prandelli ha devuelto la ilusión a Italia. “En los momentos previos de la concentración hubo tensión, pero hemos sabido dar la vuelta al asunto. Psicológicamente estamos muy bien”, destacó el entrenador, que jugará sin complejos. “No hay que tener miedo de hacer frente a España. Tenemos la fuerza y la calidad para desarrollar un buen partido”.

CUATRO DEFENSAS // Aunque Prandelli planteó el debut ante España con cinco defensas y dos carrileros de largo recorrido, lo más probable es que mañana mantenga su filosofía habitual, ya que ha recuperado a jugadores lesionados en el estreno, como Barzagli. “Espero poder preparar mejor el partido. Aunque solo tenemos un día, vamos a buscar los puntos débiles de España y trabajaremos para conseguirlo. No será fácil. Ellos son los campeones de Europa y del mundo”.

El seleccionador repartió elogios para Balotelli. “Tiene un potencial enorme y un entrenador muy bueno como Mancini, que le ayudará a crecer”, comentó un sonriente Prandelli, que bromeó cuando se le preguntó por su posible paralelismo con Del Bosque, sobre todo por su apuesta por el buen fútbol y su talante sereno. «La similitud será en el peso... si continúo comiendo como hasta ahora», dijo entre risas.

Italia recupera al lateral derecho Maggio, que estuvo sancionado ante Alemania, por lo que no tiene ninguna baja, igual que España. La selección transalpina regresó a su concentración cercana a Cracovia, donde se ha mantenido durante todo el torneo.

PEREGRINACIÓN PROMETIDA // Fiel a sus creencias religiosas, Prandelli volvió a cumplir la tradición de esta Eurocopa y caminó 10 kilómetros junto a su cuerpo técnico hasta la iglesia de la Sagrada Familia en Cracovia. La llegada al hotel de concentración de la selección se produjo pasadas las cinco de la madrugada.

Es la tercera vez que el seleccionador italiano realiza este ritual. Cuando llegaron a Polonia, tanto Albertini como Prandelli hicieron una promesa a unos monjes de un monasterio benedictino de Camaldolese. Desde ese día, no han fallado a su cita. Tras ganar a Irlanda, hicieron 21 kilómetros en tres horas y media de charla para celebrar el pase a los cuartos y que España y Croacia no pactaran el 2-2. Tras tumbar a Inglaterra en los penaltis, protagonizaron otra ruta. Fueron 11 kilómetros hasta que llegaron a un convento cerca de Wieliczcka.

Tras doblegar a Alemania, cayeron 10 más. En total, 42 kilómetros, una cifra que subirá si Italia gana la final. Entonces, Prandelli caminaría 21 kilómetros hasta el monasterio de Bieleny. El capitán Buffon también se apuntaría. España puede impedirlo. H