En una noche loca, el Madrid curó con goles la depresión del Camp Nou. Hubo 10 tantos, tres penaltis y apariciones estelares, como la de Bale, que cuajó un excelente encuentro en su estreno en casa. Marcó dos tantos y se asoció con Ronaldo, que hizo tres y dedicó el primero a Blatter, el presidente de la FIFA, que le ridiculizó para ensalzar a Messi. La otra noticia fue el regreso de Xabi Alonso tras 165 días.

Carlo Ancelotti recuperó la cordura futbolística y el Madrid volvió a su dibujo de la forma más natural. El mediocetro, Illarramendi, jugó de mediocentro; el central, Ramos, de central y el delantero, Benzema, de delantero. Y Bale por la derecha, que es donde le gusta para trazar sus diagonales y salir para armar su pierna izquierda. A su lado Ronaldo aparecía como el hombre de la noche por la burla de Blatter. El presidente de la FIFA encontró respuesta en el público que se volcó con el portugués e insultó al máximo dirigente del fútbol mundial. No faltó el gesto de Cristiano, que llegó cuando marcó el tercer tanto de penalti. El astro portugués hizo un saludo militar, parodiando el comentario de Blatter, que afirmó que Cristiano Ronaldo parece un comandante en el terreno de juego.

Hasta ahí, el partido había derivado hacia la fiesta, con un Sevilla cuya línea de cinco defensas únicamente necesitó 13 minutos para saltar por los aires. H