No solo falló escandalosamente atrás en su debut en el Mundial sino que no tuvo pegada. España se quedó sin gol ante Holanda. El único tanto llegó gracias al penalti transformado por Xabi Alonso. Ni Diego Costa, el nuevo recurso escogido por Del Bosque, ni David Silva, que falló una clarísima ocasión previa al 1-1, estuvieron lúcidos. Pedro Rodríguez puede ser la clave para reactivar la delantera de la Roja.

El delantero metió a España en el Mundial con su gol a Francia en París en marzo del 2013 y Del Bosque siempre ha creído en él.

CON HAMBRE DE JUGAR // Pero en el estreno lo dejó en el banquillo. Salió a la hora de partido con Holanda, aún con 1-2, pero con pocas opciones porque se vivía en esos momentos la descomposición de la selección de Del Bosque. “Uno siempre quiere jugar y más en campos tan míticos como Maracaná”, recalcó el delantero del Barça, que ha vivido también una temporada convulsa en el Camp Nou tras la llegada de Neymar y el excelente rendimiento de Alexis. Sus números, sin embargo, son buenos: 19 goles en sus 52 partidos, 37 como titular.

El canario no oculta que a la selección le costó generar peligro ante Holanda, circunstancia que debe modificarse ante Chile.

Es más, en momento alguno evita hablar de final, aunque ello pueda generarles mayor presión a los futbolistas. “No sé si es ansiedad, pero es verdad que sólo tenemos una oportunidad, es una final y hay que prepararse bien, mentalizarse de que no podemos fallar y hacer un gran partido. Chile es una gran selección, muy difícil, muy compacta, por cómo juega... Vamos a intentar prepararnos bien y sacar este partido adelante porque no tenemos otra oportunidad”, resaltó.

Del Bosque es consciente que necesita que Pedro, un revolucionario en el campo por su intensidad y presión defensiva, imprescindible para competir contra los chilenos, se reencuentre con su fiabilidad con el gol. H