El Villarreal B se impuso en la visita del Hércules al Mini Estadi. Los alicantinos salieron con fuerza al campo y ahogaron al filial en los primeros minutos con una presión alta que se fructificó con un gol de Carlos antes del cuarto de hora. Los canteranos se rehicieron y consiguieron empatar antes del descanso gracias a Chuca. Ya en la segunda parte, el filial dominó totalmente y cerró la remontada en el descuento con gol de Raba de cabeza.

Con el comienzo del partido el filial salió a buscar la posesión con enfoque claramente ofensivo, mientras que el cuadro alicantino salió al césped con unas líneas bien definidas y con una presión alta. Corría el minuto 13 cuando Roger Riera falló en la salida del balón, el cuero fue interceptado por la presión blanquiazul y quedó muerto en la media luna del área amarilla, donde Carlos fusiló con potencia al fondo de la red. Los minutos siguientes al gol fueron de nerviosismo y confusión en la salida de balón de los canteranos del Villarreal que, por momentos, deambularon perdidos por el césped.

El Hércules aprovechó y se vino arriba. Volcados sobre el área de Cantero dispusieron de una nueva ocasión de gol en botas de Gaspar que Miguelón saco bajo palos. Tras la ocasión, los locales asumieron de nuevo el control del cuero y comenzaron a trenzar su habitual juego de toque y posesión. Poco a poco la presión visitante ahogó menos y el filial se acercó más al área rival.

De esta forma se llegó al filo del descanso, con el cuadro dirigido por Miguel Álvarez intensificando su juego en ataque. Así fue como en el minuto 45 Chuca recibió un pase de Franquesa desde la banda, recortó con calidad a un defensa, se encaró a portería y colocó el balón en la escuadra derecha del portero herculano. Con el golazo del empate llegó el descanso del encuentro.

DOMINIO ‘IN CRESCENDO’ // Tras la reanudación, los dos equipos saltaron al verde igual que acabaron el primer tiempo. Los locales continuaron con la posesión del balón ante un Hércules bien posicionado pero con una marcha menos que en la primera mitad.

El conjunto groguet comenzó a imponerse y a acercarse con peligro al área de Falcón. De esta forma, en el minuto 57, Leo Suárez recibió un balón en banda derecha y acabó en el centro de la media luna del área visitante para disparar un misil que el portero herculano solo pudo despejar.

El partido discurrió con total control del Mini Submarino, que amplió mucho el campo con las incursiones de los laterales hasta línea de fondo. Así se llegó al minuto 92. Con el filial amarillo asediando al Hércules, Leo Suárez colgó una falta sobre el área, que remató en primera instancia Pau Torres, el portero rechazó y Raba cazó el balón con la cabeza para certificar el triunfo del filial, el primero de la era Álvarez.