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‘MENSAJE’ A LOS CRÍTICOS

Calleja: "Mi futuro está en el Villarreal aunque haya gente a la que le incomode"

Calleja recalca que tiene la confianza del club «para sacar esto adelante entre todos»

Calleja: "Mi futuro está en el Villarreal aunque haya gente a la que le incomode"

A pesar de que su equipo se desmoronara en los 10 minutos finales de su estreno en la Copa y del nuevo tropiezo en casa ante el Levante, Javier Calleja se sigue sintiendo fuerte para llevar al Submarino hacia aguas tranquilas. Fuerte y con el respaldo de la cúpula del Villarreal. «Hablo todos los días con ellos —en referencia al presidente, Fernando Roig, y al consejero delegado, Roig Negueroles— y hay confianza para sacar adelante esta situación entre todos», renfrendaba el técnico amarillo tras el punto salvado ayer en el tiempo de prolongación, gracias al gol de Pedraza.

El madrileño no se considera una pieza imprescindible en el club —«lo de menos soy yo; lo que importa es el Villarreal», enfatiza—, pero en este nuevo periodo de crisis que ha seguido al conato de reacción ante el Atlético y el Rapid no ve su cargo en peligro. «Mi futuro sigue en el Villarreal. Aunque haya gente a la que le incomode —no olvidó los pitos de un sector de la grada de La Cerámica durante el encuentro de ayer—, yo pienso estar aquí hasta el final, y el final espero que sea después de mucho tiempo», recalcaba Calleja, que sigue incidiendo en la necesidad de que su equipo se despoje de una «ansiedad» que el técnico personificaba en la figura de Gerard Moreno, uno de los hombres llamados a tener un gran peso específico en el conjunto amarillo, tanto por las estadísticas que avalaron su regreso al Villarreal este verano como por la fuerte apuesta económica en su contratación.

RETOS A CORTO PLAZO

«Gerard quizá sea el reflejo de lo que le pasa al equipo. Es trabajador, honrado, lo da todo en el campo, pero le pesa no estar acertado cara a puerta», explicaba el entrenador del Submarino, que una vez trascurrido casi un tercio de Liga prefiere esquivar referirse a expectativas a meses vista. «Está claro que en la situación en la que estamos no podemos engañarnos y mirar objetivos a la largo plazo. Lo primero que tenemos que hacer es ganar en Viena —el jueves— y seguir en lo más alto del grupo de Europa League, y después ganar al Rayo. Dentro de 10 partidos veremos dónde estamos y de qué somos capaces».

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