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CRISIS DEL CORONAVIRUS

'Sentada' del fútbol modesto de Castellón contra las restricciones

Hubo también 'minuto de silencio' en los campos en señal de protesta contra el Consell por el «maltrato» a este deporte

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Sentada de la Preferente de Castellón por las medidas de la Generalitat

El balón volvió a rodar en la Regional Preferente y en otras categorías, y además se vivió una situación insólita. El fútbol modesto se rebeló contra el Consell de la Generalitat Valenciana al considerarse el «maltratado» respecto a otros colectivos. No deja entrenar y competir a las categorías más modestas, al margen de prohibir el acceso del público, aún con restricciones, a los campos.

La Federación de Fútbol de la Comunitat Valenciana (FFCV) «invitó» a futbolistas, entrenadores y árbitros a secundar una curiosa iniciativa que se pudo ver en la mayoría de los campos de fútbol. En Preferente rodó el balón en el Javier Marquina, Noulas (imágenes que acompañan a esta información) y la Ciudad Deportiva de Alqueries. Y allí protestaron futbolistas, entrenadores y árbitros con una sentada antes de comenzar el partido.

La patronal del fútbol valenciano, además, «invitó» a los clubes a colgar las imágenes de las protestas a sus redes sociales mencionando a @FFCV_info y con los hashtags #JuguemSegurs y #VolemJugar / #QueremosJugar, para darle más visibilidad a esta protesta lleva a cabo por el fútbol modesto, el regional.

Se calcula que en la provincia de Castellón la decisión de la Generalitat y de la propia Conselleria de Sanidad de no dejar practicar fútbol a las categorías más modestas (Primera y Segunda Regional, más juveniles, infantiles, cadetes, fútbol 8, fútbol femenino y fútbol sala, afecta a más de 70.000 federados.

Lo único que se pide es que se reanuden las competiciones en estas categorías ahora que la tercera ola de la pandemia del covid-19 ha bajado mucho, Y consideran «una barbaridad» tener que esperar al 12 de abril para ver si es posible entonces poder competir. Y también solicitan, como sucede en Segunda B y Tercera, que un reducido número de aficionados puedan acceder a las gradas de los campos cumpliendo todos los protocolos y las medidas sanitarias que corresponde en una situación como la actual. Fútbol sin público en el élite es algo difícil de digerir, pero en el fútbol regional aún lo es más porque los socios de los equipos son los que sustentan a estas entidades.

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