Los hoteleros, y el sector turístico en general, rechazan de plano la más que posible subida del IVA por parte del Gobierno. Actualmente, los establecimientos aplican una tarifa reducida del 8%, y subirlo al general 18%, afirman, restará competitividad frente a otros destinos, como Grecia (donde el IVA turístico es del 6,5%), Italia (10%), Francia (7%), Portugal (6%) o Turquía (8%). Algo que mermaría incluso el turismo nacional que arrastra cuatro años de crisis.

El alza se trasladaría al precio final porque "es inviable que las empresas lo asuman", según sostiene Eugenia Arbó, de la Asociación Hotelera Salou-Cambrils-La Pineda. "Puede ser determinante para que un turista decida ir a otro sitio", advierte el propio presidente del Gremio de hotels de Barcelona, Jordi Clos.