El ministro de Economía, Industria y Competitividad, Luis de Guindos, sabe que el dossier más importante que tiene España entre manos estos días, tanto en Bruselas como en Madrid, es el futuro Presupuesto para el 2017. El Ejecutivo comunitario lleva semanas urgiendo a las autoridades españolas -la última por carta el pasado 25 de octubre- a comprometerse por escrito y a presentar "lo antes posible" las nuevas cuentas públicas y el titular de economía español ha anunciado en su reestreno en Bruselas que su intención es enviarlo "en las próximas semanas".

"Nuestra idea es presentar este proyecto de presupuesto en las próximas semanas cumpliendo nuestros compromisos del 3,1% (del PIB)", anunciaba sin precisar ninguna fecha poco después de entrevistarse bilateralmente con el comisario de Asuntos Económicos,Pierre Moscovici. Una cita previa a la reunión del Eurogrupo que se celebra este lunes en la capital comunitaria y en la que, según Guindos, no han hablado de medidas en concreto pero sí de plazos y del compromiso de España de cumplir con los objetivos: un 4,6% en 2016 y un 3,1% en 2017. "Hemos empezado a hablar y continuaremos hablándolo con los partidos de la cámara que pueden apoyar el presupuesto español", se ha limitado a explicar.

España remitió el pasado 15 de octubre un presupuesto prorrogado para el próximo ejercicio basado en un agujero presupuestario del 3,6%. Eso significa que el nuevo Gobierno deberá pactar con la oposición un presupuesto que incluya un esfuerzo estructural de medio punto, lo que significa ajustes por valor de 5.500 millones de euros. Guindos no solo no ha querido confirmar esa cifra -"hay diferentes alternativas", se ha escudado- sino que sugiere que la mejoría en las previsiones de crecimiento tanto para 2016 como para 2017 permitirán a España elaborar unas nuevas cuentas públicas con un recorte inferior al previsto.

Según el último cuadro macroeconómico, España crecerá este año un 2,9% y un 2,3% en 2017. Sin embargo, los datos, según el ministro, "ponen de manifiesto que el crecimiento va a ser claramente superior este año y que el año que viene también lo puede ser" lo que significa "buenas noticias", ha explicado sin precisar unas proyecciones que presentará la Comisión Europea el próximo 9 de noviembre. "Si hay más crecimiento económico hace más fácil el cumplimiento del 3,1%", ha indicado anunciando que las medidas adoptadas por el gobierno en funciones este año permitirán "cumplir holgadamente con el 4,6%" este año.

Además de dar explicaciones sobre las cuentas españolas ante el Eurogrupo, Guindos acudirá este martes a la sede de la Eurocámara a explicar ante las comisiones de asuntos económicos y política regional las razones del desvío y a defender por qué España no debe ser castigada con la suspensión de entre 1.100 y 1.300 millones de euros de fondos estructurales en el 2017. En agosto, el Ecofin decidió suspender el castigo -una sanción de hasta 2.000 millones- por no adoptar medidas contra el déficit público en el 2015 pero queda pendiente la suspensión de fondos. El ministro confía en que tanto la Eurocámara como la Comisión Europea terminen entendiendo "España ha cumplido la acción efectiva" y que el castigo quede también en suspenso.

Moody's duda que se pueda cumplir el déficit pactado

La agencia de calificación Moody's ha alertado este lunes de que el nuevo Gobierno va a encontrar problemas para implementar reformas, lo que tendrá un impacto negativo en su perfil crediticio, al tiempo que ha mostrado "poca confianza" en que España alcance los objetivos de déficit pactados con la CE para este año y siguientes.

Según un informe remitido por la agencia de calificación de riesgos, la falta de una mayoría clara del Ejecutivo, junto a la naturaleza "fragmentada" del Parlamento, son "importantes escollos" para dar solución a la "debilidad estructural" de las finanzas públicas españolas, informa Efe. Asimismo, según la vicepresidenta de Moody's y coautora del informe, Sarah Carlson, será complicado que el Gobierno tenga un apoyo legislativo y popular para llevar a cabo las reformas que la agencia considera necesarias en aspectos como un control más efectivo sobre las finanzas regionales, y un menor gasto sanitario y de la Seguridad Social. Por ello "cabe la posibilidad de otra ronda de elecciones anticipadas", concluye.

Moody's recuerda que España ha incumplido "repetidamente" sus objetivos de déficit, y no cree que lo consiga con el 4,6 % del PIB pactado para este año con la CE. Para los siguientes ejercicios, el Presupuesto para el 2017 será el primer examen "clave" del nuevo Ejecutivo, afirma, y recuerda que son necesarias medidas con un efecto estructural del 0,5 % del PIB (5.000 millones) tanto en el 2017 como en el 2018.